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Los rumores de traspasos están a la orden del día, los  equipos intentan moverse para mejorar la plantilla e ir en busca de algo grande y otros ya se ponen a pensar en la reconstrucción. Toronto es uno de los equipos que todavía no tienen la urgencia de pensar en el futuro con una profunda renovación y si bien no arrancó bien ha enderezado el rumbo y está en zona de playoffs (octavo con marca de 17-19), aunque lejos de ser una seria amenaza al título. A sus 34 años a Kyle Lowry ya comienzan a consultarle por el final de su carrera y una ola de rumores habían puesto sobre la mesa las intenciones del base de emigrar en busca de otro equipo con mayores a aspiraciones a un anillo.

Pero como en estas horas y hasta el 25 de marzo, fecha límite de traspasos, los pasillos están llenos de noticias sin tanto sustento, Kyle Lowry salió a echar luz sobre esos dichos y afirmó: “Pase lo que pase siempre seré un Raptor de Toronto”

Esta afirmación tiene como segura su lealtad hacia la franquicia desde el corazón y el aprecio que le tomó en estos nueve años, pero se está estudiando la posibilidad de un cambio. “Al final del día, yo mismo, mi agente, la organización todos tenemos que hacer lo correcto para darle un buen final a esta situación. No tengo la bola de cristal, no sé que es lo qué va a pasar, no sé lo que están pensando”.

Kyle ha sido un emblema de la franquicia desde su llegada en el 2012 con grandes temporadas que no se veían coronadas con llegadas a la final, pero si fueron de un crecimiento constante que se vieron en su punto máximo con el título en la temporada 2019/2020.

Un título siempre marca a fuego a los protagonistas y para Lowry no es la excepción, su corazón está en Toronto, aunque a su carrera deportiva aún le falte un capítulo más y en busca de la gloria nuevamente pueda ser muy útil para las aspiraciones de otros equipos