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Lonzo Ball, Tyrese Haliburton, Payton Pritchard, entre otros, este año. El año pasado Zion Williamson, Ja Morant, R.J. Barret, etcétera. Todos los años aparecen nuevas estrellas en las que los fanáticos de la NBA ponen sus ojos y mientras tantos, otros jugadores que ya estaban en la liga tienen grandes progresiones completamente inesperadas.

Una de las sorpresas de este año es Chris Boucher. No es el mejor presente de los Toronto Raptors, pero este ala pivote pasó de 6.6 puntos, 4.5 rebotes, 47 % en TC y 13 minutos a 16.1 tantos, 7 rebotes y 60% en tiros con 47% en triples en 23 minutos.

Otro que ya al final de la temporada pasada se empezó a hacer un nombre es Luguentz Dort. El escolta de los Oklahoma City Thunder pasó de tener un contrato Two-Way con los Oklahoma City Blue de la G-League a ser un titular indiscutible en la rotación de los OKC. 13 puntos, 48 por ciento en TC y 44% en triples tirando casi cinco por partido.

La ida de Jerami Grant de los Nuggets es una de las razones por las cuales no están funcionando tan bien. Ahora, el jugador de los Pistons está promediando 24.9 puntos contra los 12 de la temporada pasada, toma muchísimos más tiros (18.6 y antes 8.9) y juega diez minutos más (36 min).

La llegada de Christian Wood a los Rockets significaba el fin del Small Ball. El equipo no pasó por un gran clima debido a todo el problema con James Harden, pero él se las arregló para hacer 23.8 puntos, 10.7 rebotes y jugar 33 minutos, agigantando sus números de una temporada a otra.

Shake Milton es uno de los jugadores de esta lista más curiosos. El jugador fue número 54 en el draft de 2018 y, en solo dos años, ya es el sexto hombre de Philadelphia 76ers. En la temporada 19/20 hacía 9.4 puntos y ahora 17 tantos, se encarga mucho más del ataque cuando está en cancha y lanza más que antes debido a que lleva la voz cantante en la segunda línea.