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Desde hace unas semanas, John Wall estaba en boca de todos porque se hablaba de un supuesto traspaso con Russell Westbrook. Finalmente se confirmó este movimiento y la pregunta que se viene a la cabeza ahora es sobre cómo estará para jugar dado que hace dos años no pisa una cancha.

El jugador de 30 años siempre fue un estandarte para la franquicia de la capital. Fue elegido numero 1 en el draft de 2010 y desde ese momento se convirtió en alguien vital para el equipo. Cinco veces All Star, formó parte del tercer mejor quinteto de la NBA en 2017 y es el tercer máximo anotador en la historia de los Wizards aunque, lamentablemente para él, no todo es color de rosas.

El base de 1.93 mts sufrió una lesión en la rodilla izquierda, en enero de 2018, que lo alejó de las canchas dos meses. El 29 de diciembre tuvo un estrago en el talón de la misma pierna que antes, que lo apartó el resto de la temporada. Mientras se recuperaba de este ultimo inconveniente, sufrió una infección en la cirugía y, además, se rompió el tendón de Aquiles cuando estaba descansando en su casa, esto último hizo que se perdiera toda la temporada 2019-20.

Ahora, ya recuperado y con vistas a la nueva temporada y con nuevos objetivos, está la esperanza que vuelva a ser ese jugador determinante que entraba a canasta como él solo sabía, con los tan conocidos 360º, y forme una gran dupla con James Harden.