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Stockton, el hombre que se quedó con dos pelotas históricas del Dream Team

18:33 12/06/2021 | Su cuenta pendiente siempre será el anillo de campeón, pero se quedó con un premio que nadie tiene: los balones de las consagraciones de Barcelona 92 y Atlanta 96.

John Stockton fue medallista de oro con la Selección de Estados Unidos en 1992 y 1996
John Stockton es de esas estrellas de la historia del deporte que jamás logaron tocar el cielo con las manos. Dominó la NBA durante una década en dos apartados estadísticos. Nadie dio más asistencias ni robó más pelotas que él en todos los tiempos de la liga. Sin embargo, le quedó una cuota pendiente: el anillo de campeón. Jordan y los Bulls lo amargaron. De todos modos, puede decir que se quedó con dos de las pelotas más importantes de la historia de Estados Unidos.
 
El mote de Dream Team nació en 1992 cuando se habilitó que los jugadores profesionales puedan participar de los Juegos Olímpicos y en EEUU armó el mejor equipo de todos los tiempos. El base fue una pieza fundamental de esos 12 jugadores que arrasaron y se colgaron la medalla dorada en Barcelona. 
 
Por su rol de base, Stockton fue quien tuvo la pelota en sus manos cuando sonó el silbato final. En el caso de la cita olímpica disputada en España, sus colegas croatas le pidieron que no tire al aro en la última bola ya que el encuentro estaba completamente definido. El histórico jugador de Utah Jazz aprovechó y se guardó la pelota como trofeo. Él mismo lo cuenta en su autobiografía llamada Assisted. 
 
Cuatro años más tarde, el base volvió a formar parte de la Selección de Estados Unidos para los Juegos Olímpicos a disputarse, en condición de local, en Atlanta. La historia se repitió. Nadie pudo frenarlos, la presea dorada terminó en su cuello y la pelota en sus manos, esta vez porque Lenny Wilkens le dio la orden de que se quedara picando hasta el final. 
 
Todo Salt Lake City y Utah Jazz le agradecieron por defender sus colores con una estatua en las puertas del Vivint Smart Home Arena y el base les devolvió la gratitud con las dos pelotas de sus coronaciones olímpicas, que están exhibidas antes llamado Delta Center.
 

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