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Instituto es uno de los clubes de la Conferencia Norte que ha sido capaz de ganar los dos partidos que disputó en el inicio de la Liga Nacional. Charlamos con Sebastián Ginóbil, entrenador en jefe del plantel, sobre el rendimiento del equipo, sus virtudes y sus falencias en lo que va de la temporada 2020/21.

"El rendimiento no es lo que buscaba. El tema es que es muy difícil en este sistema y sin haber jugado por tanto tiempo llegar al cien por ciento. Me gustaron mucho la energía, la intención y las ganas. Por ahí estamos un poco deficientes tanto ofensiva como defensivamente, sobre todo en la circulación y en la fluidez", señaló el coach a la hora de hablar del balance de estos dos juegos.

Además, añadió que estos días de descanso provocados por el arranque de la acción en la Conferencia Sur estaban enfocados en eso: "Es a lo que apuntamos en estos días de entrenamiento: poder estar juntos y corregir algunos errores. Me gustó la manera en que competimos, pero hay muchas cosas que corregir en cuanto al juego de conjunto".

Al analizar puntualmente la victoria ante Olímpico La Banda, Ginóbili sostuvo que mantenerse concentrados fue la clave: "Creo que ganamos por la agresividad y la intensidad. No pienso que desde el juego hayamos hecho mucho para dar vuelta el partido. Sí estuvimos duros, intentamos y no nos frustramos. Me parece que eso fue lo que nos dio la posibilidad de revertir el resultado. Pero, como te digo, todavía tenemos en el debe el juego de conjunto".

Instituto se ha exhibido como uno de los candidatos no sólo por estas primeras victorias, sino por la cantidad de jugadores de renombre que ha sumado en el mercado. Sepo hizo una evaluación del rendimiento de los nuevos: "Los refuerzos estuvieron bien. Por ahí Nacho Alessio y Gonzalo Torres se cargaron de faltas muy rápido y tuvimos que jugar bastante tiempo con dos aela pivotes, pero estuvieron bien y entienden lo que buscamos. Se brindan al juego en equipo, al igual que Néstor Colmenares", confesó.

Y agregó: "La verdad que todos los refuerzos que hemos tenido, incluso Mateo Chiarini que el jueves tuvo un partido muy bueno, han rendido al nivel que esperábamos. Obviamente que son parte del juego en cojunto y eso hay que mejorarlo. Está bueno conocernos en competencia y meterlo de a poco a Néstor, porque lleva dos partidos y dos prácticas con nosotros. No podemos esperar que él sea el que nos guíe. Hay que involucrar mucho más a todos los jugadores".

Disputar la competencia en una burbuja es una experiencia compleja y distinta para los protagonistas. Sin embargo, el entrenador del conjunto cordobés lo vive con la certeza de que es un privilegio dentro del contexto en el que se encuentra el país y el mundo: "Primero, alegría por poder volver a competir. Estar en una cancha, dirigir, poder competir con otros equipos. Ser parte de la Liga Nacional genera mucha alegría después de tanto tiempo encerrados. Después, en cuanto al tema del formato, es obvio que para un entrenador no es lo ideal esto de jugar tantos partidos seguidos sin tiempo de preparación. Pero bueno, es la única forma de volver que había y ya con tener una manera de competir me da alegría. Lo estoy viviendo así: compartiendo con el equipo, buscando el objetivo en común. La verdad es que se vive igual que una Liga Nacional normal, pero salvando esas distancias. Creo que pudimos entender que somos privilegiados. En ese sentido, el formato pasa a un segundo plano".

Leandro Carranza | [email protected]
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