10:22 16/04/2018
En el cierre de Houston-Minnesota se vivió una particular jugada, en la que tanto Karl-Anthony Towns como uno de los árbitros se olvidaron que James Harden ya había tomado el primero de sus lanzamientos libres (en el medio hubo un tiempo muerto). Towns caminó con el balón en sus manos pero nadie lo notó y los Wolves terminaron consiguiendo un doble fácil en el otro costado, para la furia de todos los Rockets.