Sucedió durante el último cuarto del partido que Lakers le ganó a Indiana por 88-87. Carlos Boozer empujó a Roy Hibbert, éste cayó al piso, se levantó y fue directo a increpar a su rival, generando un tumulto que involucró a los jugadores de ambos equipos.
Mientras Rodney Stuckey y Luis Scola retiraban a Hibbert, los árbitros analizaron la jugada. Al final, los encargados de impartir justicia resolvieron cobrar falta flagrante de grado uno al interno de los Lakers, y una técnica al centro de Indiana.