Con el paso de los años y el repaso de la historia, Atenas se encuentra ante la segunda vez que deberá defender el honor de ser el único equipo que ha participado en todas las ediciones de Liga Nacional. La ocasión anterior fue ante Quilmes de Mar del Plata; y en esta frente a Weber Bahía.
¿En qué se debe basar un equipo para superar estos trances? Sin dudas, en la experiencia. Y justamente entre estos dos equipos es algo que no sobra. Por eso, la presencia y bagaje de “batallas” que tiene Pablo Bruna pueden ser un punto clave en el equipo dirigido por Cristian Colli y Nicolás Arduh.
El base ha jugado distintas definiciones, consiguiendo por ejemplo dos ascensos y siendo el jugador más valioso en esas instancias, con las camisetas de Instituto y Platense. Por eso conoce lo que significa tener responsabilidades que sobrepasan el desafío que supone ganar un juego de fase regular. Pero claro, no es lo mismo. Y él lo reconoce.
“Es una situación totalmente atípica en lo personal. Es la primera vez que me toca jugar un playoffs por no descender. Por eso estoy tratando de aprovechar estos diez días para entrenar mucho lo físico, que estando en Buenos Aires prácticamente era imposible, y a medida que se va acercando el primer partido ir puliendo lo basquetbolístico”, dijo.
Luego, comparando instancias de definición, agregó: “Es totalmente diferente. Se vive mucho más la tensión que la presión. En un playoffs por el campeonato sabés que lo peor que te puede pasar es despedirte del torneo para pensar en el próximo”.
-¿Y cómo se maneja?
-Estoy trabajando eso desde lo mental. Tratar de que esa tensión no afecte nuestro juego y estar lo más concentrado posible, sabiendo que tenemos el peso de estar defendiendo la camiseta del equipo más ganador de la Liga y que jugó todas las ediciones de la competencia. A eso lo tenemos que transformar en energía positiva para aprovecharla en los partidos.
-¿Se puede trasladar esa experiencia a los más jóvenes, con tanta experiencia?
-Sí. Trato de que todos estemos focalizados en lo que tenemos que hacer, en el plan de juego que nos pide el entrenador. Si dejás volar la cabeza en supuestos, empiezan a entrar las dudas y eso en cualquier playoffs te pone en desventaja. Lo bueno es que podemos salir de ese “piloto automático” de jugar tan seguido y vamos a poder preparar mejor los partidos y mejorar nuestros errores.
-Te referís a vorágine y preparación… ¿en dónde están parados para asumir este compromiso?
-A Atenas lo veo bien. Lo positivo es que cada vez que tuvimos tiempo de preparar los partidos, nos fue bien; lo que debemos mejorar son nuestras lagunas, porque son muy pronunciadas y nos han costado muchos juegos.
“Debemos mantener la concentración durante los momentos buenos; y en los momentos en que no salen las cosas en ofensiva, mentalizarnos en que podemos manejar el ritmo de partidos, que es algo clave para jugar contra Bahía”, explicó.
Sobre la serie que se viene, Bruna analizó: “Sin dudas va a ser un playoffs de mucha intensidad. Creo que el que controle más la cantidad de errores será quien tenga una ventaja. Somos dos equipos con muchos jugadores jóvenes, y por eso pienso que el manejo de la ansiedad puede ser una clave. Nosotros debemos hacer valer esa pequeña cuota de experiencia que tenemos por sobre ellos para manejar los ritmos y momentos”.