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Argentina volvió a dar una muestra de básquet total. En esta oportunidad en el marco de las semifinales y con la potente Francia enfrente. Los dirigidos por Sergio Hernández volvieron a ganar la batalla mental y de ritmos y redujeron a la mínima expresión a los europeos, a los cuales terminaron superando por un marcador 80-66 para avanzar a la gran final del Mundial. Todos los jugadores franceses sintieron el rigor y estuvieron incómodos en la cancha; uno de ellos fue Rudy Gobert, quien no pudo desequilibrar y solo aportó 3 puntos (1/3 de campo).

El pivote francés, tras la derrota y en la previa al duelo por el tercer puesto ante Australia, ponderá la tarea del equipo argentino: "Ellos fueron el mejor equipo dentro de la cancha, desde el primero y hasta el último minuto. Fueron más agresivos. Jugaron más como un equipo en comparación con nosotros. Se defendieron, cerraron todas las líneas de pase. Fue una dominación total".

El jugdaor de Utah Jazz, dos veces elegido como el mejor defensor de la NBA, también se refirió al deseo argentino y a la claridad táctica: "Recibimos una gran bofetada, literal y figurativamente. Ellos querían el juego más que nosotros. Lo has visto desde los primeros minutos. Estábamos realmente preparados, pero fueron más agresivos. No pudimos hacer los ajustes y caímos en su trampa".