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El reciente mercado de la NBA no ha sido muy fructífero para los Spurs debido a que no pudieron traspasar a Pau Gasol, el jugador que estaba apuntado para dejar la franquicia. El jugador de 38 años cuenta con un contrato de 16.8 millones de dólares -tercero más elevado del plantel- y ese fue el principal limitante a la hora de encarar cualquier tipo de negociación. Está claro que ya no tiene la misma injerencia dentro de la rotación de Gregg Popovich y así lo demuestra la disminución de sus minutos en cancha.

El detonante fue una lesión que sufrió en el pie durante noviembre del año pasado, que le demadó más de un mes de recuperación y que terminó por relegarlo en cuanto a la consideración del cuerpo técnico. Desde que volvió sólo ha jugado más de 20 minutos un día y la mayoría de ellos no pasa los 10. La noche de sábado no fue la excepción, ya que solamente disputó 7 minutos en la derrota ante Utah Jazz (105-125).

"Estoy concentrado cada día para estar preparado, dar lo mejor de mí en todo lo que esté bajo mi control, ser un profesional y un buen compañero. Es todo lo que puedo hacer, lo mejor que puedo hacer. Pero, obviamente, no es la situación ideal", explicó el catalán en los vestuarios, luego de la caída de los Spurs.

ESPN y varios medios españoles explicaron que el propio jugador le pidió a los Spurs irse de la organización. ¿Cuál podría ser la opción? Ser cortado por los texanos antes de la fecha límite del 1 de marzo, para así poder sumar a la lista de agentes libres y negociar desde cero cualquier tipo de vínculo con otra franquicia. Los Raptors, que recientemente incorporaron a su hermano Marc y que cuentan con Sergio Scariolo dentro del staff técnico, podrían ser un destino probable.