Los detalles y las consecuencias de la peor derrota de los Bulls
19:48 10/12/2018 | La franquicia que supo tocar el cielo con las manos gracias a Jordan y compañía perdió por 56 puntos ante Boston y sufrió el revés más duro.
La temporada 2018/19 está siendo un verdadero suplicio para los Chicago Bulls: solo lograron seis triunfos en 27 presentaciones para posicionarse en el fondo de la Conferencia Este, un inicio que se llevó puesto al entrenador Fred Hoidberg. El reemplazante designado por los despachos fue su asistente Jim Boylen, que lamentablemente no pudo corregir la curva descendente en sus primeros partidos. Muy por el contrario, tocaron fondo el último sábado con él al mando.
La derrota 133-77 contra Boston del fin de semana fue la peor en la historia de la franquicia en cuanto al margen de diferencia (-56). A su vez, los Celtics igualaron la mayor ventaja lograda por un equipo en condición de visitante: en 1986, los Supersonics habían superado 136-80 a los Rockets en Houston. Obviamente que este revés trajo sus consecuencias para la franquicia de Chicago, una de las más reconocidas a nivel mundial desde que Jordan la colocó en la cima del mundo.
Según un informe de ESPN, los jugadores están descontentos con las maneras de Boyden: su actitud, la disminución de minutos a los titulares y las prolongadas sesiones de trabajo han irritado a un plantel que en un primer momento no iba a presentarse en el entrenamiento a modo de protesta. Finalmente esa opción se diluyó y se transformó en una reunión grupal en la que solo participaron jugadores; Zach Lavine y Justin Holiday llevaron la voz cantante.
Posteriormente se produjo la misma metodología entre los miembros del cuerpo técnico, en una conversación en la que se sumó el GM Gar Forman y el presidente ejecutivo John Paxson. Ambos le mostraron su apoyo al coach y a su metodología de trabajo. Igualmente los sucesos recientes, tanto dentro como fuera de la cancha, han generado un cimbronazo en los cimientos de la organización. Habrá que ver con la continuidad de los partidos si las conversaciones han servido para calmar las aguas y encarrilar una situación muy adversa. Por lo pronto, este lunes saldrán a su cancha, esa misma que los abucheó el sábado, para enfrentar a Sacramento Kings.