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La noticia que publicó la NBA la última semana en la cual comunicaba los finalistas de los distintos premios individuales causó sorpresa por varios nombres presentes. Uno de ellos fue el de Naz Reid, de Minnesota Timberwolves. Pero no quedó solo ahí, el pivote finalmente fue elegido como el Mejor Sexto Hombre superando a Malik Monk, de Sacramento Kings, el gran candidato.

Naz, que en agosto de este año cumplirá 25 años, llegó a la NBA por la ventana. Luego de finalizar su etapa de escuela secundaria en su Nueva Jersey natal, concurrió a la prestigiosa universidad de LSU. Jugó una sola temporada para los Tigers y promedió 13.6 puntos y 7.2 rebotes. Excedido de confianza, Reid contrató un agente cuando terminó la temporada 2018/19, decidió inscribir su nombre en el draft de la NBA renunciando a los tres años que aún le quedaban para jugar en la NCAA.

Pero Reid no fue seleccionado en el draft, ningún equipo le vio condiciones para sumarlo. En esa edición, la 2019, hubo nombres importantes: Zion Williamson fue el pick 1, Ja Morant el 2, RJ Barrett el 3, Coby White el 7 (ganó el premio al jugador Más Mejorado en la temporada actual), entre otros. Pese a eso, Minnesota le ofreció un contrato dual para jugar también en Iowa Wolves, la filial de la franquicia en la G-League.

Naz tuvo un rápido impacto en la liga de desarrollo y solo jugó un puñado de partidos antes de sumarse definitivamente a los Timberwolves. En 16 juegos tuvo números impresionantes: 18.4 puntos, 9.8 rebotes y 2.8 asistencias. A principios de diciembre del 2019, Reid hizo su estreno en la NBA. En esa primera temporada terminó disputando 30 encuentros, 11 como titular, y tuvo medias de 9.0 tantos, 4.1 rebotes y 1.2 pases gol.

A partir de la segunda temporada, Naz ya estuvo definitivamente incluido en el equipo de la NBA. Su presencia comenzó a crecer progresivamente. En la 2021/22 tuvo un pequeño bajón, estuvo poco como titular y bajó considerablemente su producción. Pero en la 2022/23 volvió a ganar terreno, mejoró considerablente y en la actual, dio su gran salto y se convirtió en una pieza importante en el equipo dirigido por Chris Finch. Tal es así el protagonismo de Reid viniendo del banco de suplentes que se ganó el reconocimiento, nada más y nada menos, que el de Mejor Sexto Hombre.