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Klay Thompson está buscando asegurar un contrato importante con los Warriors el próximo verano después de rechazar extensiones esta temporada baja. Sin embargo, esto no ha funcionado hasta el inicio de la temporada. Informes de ESPN indican que las negociaciones contractuales están afectando considerablemente la actitud de Thompson en la cancha, en el banquillo y con sus compañeros de equipo.

Klay se encuentra en el último año de un contrato de cinco años y 190 millones esperando ganar más de 43 millones en esta temporada. Recuperar un salario como ese puede ser imposible para Klay, quien obtuvo este contrato en el verano de 2019 después de su desgarro de ligamento pero antes de su desgarro de Aquiles en 2020.

La mejor apuesta de Klay es impresionar lo suficiente a los Warriors para que le ofrezcan un nuevo contrato, pero necesita jugar lo suficientemente bien para obtener la cantidad de dinero que siente que merece. Las nuevas reglas salariales en la NBA significan que los Warriors no pueden simplemente pagarle a Klay cualquier cantidad que deseen para respetar sus contribuciones a la franquicia.

No pueden permitirse pagar a Curry, Klay y Draymond más de 100 millones combinados a su edad actual sin una producción que lo respalde. Klay continúa sufriendo dificultades con los peores promedios de puntos, tiros de campo y de tres puntos en su carrera desde su temporada novato en 2011.