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Apenas un dias después de sufrir la lesión más dura de su carrera, Tyrese Haliburton rompió el silencio. El base de los Indiana Pacers utilizó sus redes sociales para compartir un mensaje cargado de emoción desde la cama del hospital, tras ser operado por la rotura del tendón de Aquiles derecho que sufrió en el primer cuarto del juego 7 de las Finales ante Oklahoma City Thunder. La imagen que acompañó el texto lo mostró con sonriente y con un corazón formado con las manos, pero las palabras hablaron de una herida mucho más profunda.

“No sé cómo explicarlo, salvo decir que estoy en shock. Las palabras no alcanzan para expresar el dolor de esta desilusión. La frustración es inconmensurable. He trabajado toda mi vida para llegar a este momento… ¿y así es como termina? No tiene sentido,” escribió Haliburton. “Ahora que ya me operaron, desearía poder contar cuántas veces la gente me va a decir que voy a ‘volver más fuerte’. Qué cliché, jaja. Esta mierda apesta. Mi pie se siente como un peso muerto. Pero creo que lo que más me duele es la cabeza. Siento que estoy divagando, pero sé que esto va a ser algo de lo que me voy a sentir orgulloso cuando lo supere. Me hace bien sacar todo esto sin que ustedes vean al chico llorar feo.”

El dolor no fue solo físico. Haliburton, de 24 años, había sido el motor de una campaña histórica para los Pacers, que volvían a disputar unas Finales después de 24 años. A pesar de haber sufrido una molestia en la pantorrilla en el quinto juego, jugó el sexto sin restricciones y forzó el decisivo séptimo partido, donde cayó en el primer cuarto tras una penetración que terminó con su tendón desgarrado. Pero incluso así, no se arrepiente de haber seguido en cancha: "Honestamente, ahora mismo, con el tendón de Aquiles roto y todo, no me arrepiento. Lo haría de nuevo, y otra vez después de eso, por esta ciudad y por mis hermanos. Por la chance de hacer algo especial."

Sobre el cierre, dejó un mensaje que fue tanto un pedido de disculpas como una promesa para el futuro. "Indy, lo siento. Si hay una afición que no merece esto, son ustedes. Pero juntos vamos a luchar con todo para volver a este mismo lugar y superar este obstáculo. No tengo dudas de que ustedes me respaldan, y espero que sepan que yo los respaldo a ustedes..."

Y concluyó con una reflexión que confirma su temple competitivo: "Mi camino hasta donde estoy hoy no fue casualidad, me he exigido todos los días para ser grande. Y voy a seguir haciéndolo. Lo más importante de todo esto es que estoy agradecido. Agradecido por cada experiencia que me trajo hasta acá. Agradecido por todo el amor del mundo del básquet. No es que tengo que pasar por esto, me toca pasar por esto. Agradecido por el camino que viene por delante. Miren cómo voy a volver de esto. Así que denme algo de tiempo, me voy a sacudir el polvo y voy a volver a ser la mejor versión de Tyrese Haliburton."

Su temporada 2025-26 parece prácticamente descartada, pero en medio de la angustia, Haliburton dejó en claro que su historia en Indiana —y en la NBA— está lejos de terminar.

 

 

 

 

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