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El Barça de Joan Peñarroya debutó en la temporada con una contundente victoria ante Coviran Granada, en un encuentro donde nunca se sintió amenazado. A pesar de no contar con algunas de sus figuras clave, los azulgranas encontraron en jugadores como Chimezie Metu y Joel Parra el motor necesario para sacar adelante el partido. Desde el primer cuarto, el dominio físico y táctico de los locales quedó claro, aprovechando las numerosas imprecisiones y pérdidas de los granadinos para marcar diferencias en el marcador.

El arranque del Barça fue marcado por un Parra inspiradísimo, que con sus 10 puntos iniciales lideró a su equipo desde el triple y el contraataque. Granada intentó resistir apoyándose en Sergi García, pero las siete pérdidas en el primer cuarto y la sequía desde el perímetro (1/11 en triples) complicaron sus opciones. Para el descanso, la ventaja culé era inapelable, con un 43-21 que reflejaba la clara superioridad de los locales en ambos costados del campo.

En el tercer cuarto, Granada tuvo un breve respiro con Sergi García, quien anotó 15 de sus 22 puntos en ese período. Sin embargo, fue solo un espejismo, ya que el Barça ajustó rápidamente con Metu y Parra volviendo a la carga. La actuación final del americano, con puntos, rebotes y tapones, selló el triunfo para los de Peñarroya. Nico Laprovittola, aunque entrando desde el banquillo, sumó minutos importantes en la segunda mitad, colaborando con su experiencia y visión de juego. En números; 5 puntos, 4 asistencias y un rebote en 18 minutos.

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