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Tras la dura derrota contra Eslovenia por los octavos de final, Argentina arrancó el camino de los partidos por el 9º al 16º puesto enfrentando a Camerún, tratando de dejar atrás el sabor amargo de haber tenido la pelota para ganar y seguir por la fase campeonato.

Argentina arrancó remando, ya que durante los primeros minutos fue Camerún quien controló las acciones. Tyler Kropp mostró todas sus variantes en ataque y pese a la desventaja física, supo ser la vía de gol argentina. Los de Mauro Polla cerraron mejor el primer cuarto y con las apariciones de Felipe Minzer y Thiago Sucatzky, se escaparon y sellaron el 25-14.

En el segundo período Argentina continuó dominando, estirando el buen trabajo del cierre del primer cuarto. La segunda unidad tuvo un buen ingreso, liderada principalmente por Fidel Cifuentes que fue la vía de gol más efectiva de los albicelestes. Camerún reaccionó, descontó y se mantuvo en juego, pero nuevamente apareció Kropp para estirar la diferencia y permitirle a Argentina marcharse arriba al descanso largo por 46-30.

En el tercer cuarto, Argentina arrancó en gran nivel, mostró autoridad, dominó con contundencia y de la mano de Kropp, Sucatzky e Iván Prato, aumentaba la ventaja. Camerún no podía parar el juego argentino que llegó a sacar 20 (54-34). Pero los africanos ajustaron su juego, empezaron a descontar y llegaron a ponerse a 10 (56-46) con un parcial de 12-2. Los de Polla recuperaron su nivel de juego, volvieron a controlar las acciones y se marcharon al último cuarto ganando 70-53.

En los últimos diez minutos, Argentina le bajó la persiana al partido. Controló las acciones, no le dio chances de reacción a Camerún y terminó llevándose la victoria por un contundente 85-67.

Tyler Kropp fue el goleador con 25 puntos y además sumó 9 rebotes con 25 de valoración. Por su parte, Thiago Sucatzky terminó con 14 puntos y 15 asistencias, récord histórico del torneo. Mañana Argentina volverá a enfrentarse a Serbia por las semis que definirán los puestos 9º al 12º. 

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