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La diferencia entre un equipo y otro pudo verse a las claras desde el primer cuarto, con un Dallas que salió encendido desde el vestuario y quebró el marcador en un abrir y cerrar de ojos. Dirk Nowitzki y Tyson Chandler, en su regreso al Madison Square Garden, dominaron el juego interior (16 puntos entre ambos), mientras que Chandler Parsons y Devin Harris aportaron tres triples para dejar el marcador 36 a 24 en su favor.

La defensa de los Knicks subió su producción en el segundo período, dejando a Dallas en apenas un 32% de cancha. Sin embargo, en el otro costado, los de Prigioni no aprovecharon las oportunidades y apenas pudieron llevarse los segundos doce minutos por 20 a 18, llegando al entretiempo abajo por 54 a 44.

Lamentablemente para las intenciones de New York, el ataque de los dirigidos por Rick Carlisle despertó en el arranque de la segunda mitad, con buenos momentos de Monta Ellis y Nowitzki, más un importante ingreso desde el banco del nigeriano Al Farouq Aminu.

Carmelo Anthony se encendió en el local para conseguir 12 puntos en el tercer parcial, pero sus compañeros no lo acompañaron demasiado en ataque y la diferencia se agrandó, llegando a ser de 81 a 68 al ingresar al último período.

Cualquier esperanza de remontada para los de Fisher quedó rápidamente descartada en el cuarto parcial. Casi sin usar a sus titulares (apenas dos minutos de Ellis y otros dos de Chandler), los Mavs rompieron definitivamente el partido con su banco de suplentes, anotándose con seis puntos cada uno Brandan Wright, José Juan Barea y Richard Jefferson. Los Knicks ya no tuvieron respuestas y el encuentro terminó con la visita llevándose la victoria por 107 a 87.

La caída representa la 12° en 13 partidos para un equipo de New York que ahora tiene un récord muy pobre de 5-22, y que comienza a sentir cada vez más presión depositada sobre las caras visibles de la franquicia: Carmelo Anthony en el campo, Derek Fisher en el banco y Phil Jackson en la gerencia.

Como es habitual, Dallas contó con un goleo muy repartido que incluyó a nueve jugadores con al menos siete puntos. El mejor fue Nowitzki con 16, mientras que Chandler aportó 8 puntos y 14 rebotes contra su ex equipo, en sólo 25 minutos de juego. En los Knicks, como viene sucediendo hace rato, de poco sirvieron los 26 puntos de Anthony.

Pablo Prigioni: 5 puntos, 9 asistencias, 5 robos, 1 rebote, 1 falta cometida, 1-1 en dobles y 1-3 en triples durante 21 minutos de juego.