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La situación por el Coronavirus en el viejo continente es realmente delicada y, de hecho, España e Italia son los dos países más complicados, que también son los dos con mejor nivel de básquet. Si bien en el segundo se tomó la decisión de cancelar la Lega, en el primero aún no se tomaron medidas al respecto más que la suspensión provisoria.

El director técnico del conjunto catalán está a la expectativa de lo que sucederá para ver cómo retomar las actividades junto a sus dirigidos: “Dependiendo de lo que diga el gobierno español tomaremos unas decisiones u otras a la hora de la vuelta a los entrenos. Tenemos tres pabellones, el Palau y dos en la ciudad deportiva, con gimnasios separados. Veremos. Estamos viendo varias opciones de entrenamiento. Mi objetivo y el del club es terminar esta temporada, pero no depende de nosotros“.

Además, remarcó el hecho de que en Europa se juegan varios torneos, no solo las ligas locales: “FIBA, Euroliga y las Ligas nacionales deben mostrarse pragmáticas y tener cierta creatividad para saber no sólo cómo terminamos, sino cómo empezamos, jugamos y acabamos la siguiente temporada. No podemos olvidar que no somos la NBA, donde sólo hay una única competición. Aquí jugamos un mínimo de dos y podemos llegar a jugar también preolímpico”.

Por último, dejó en claro que organizaciones, clubes y jugadores deben trabajar en conjunto para encontrar la mejor salida: “No es fácil hacerlo y por eso es importante la colaboración entre estos tres estamentos del mundo del baloncesto. Pienso que jugar la próxima temporada con el sistema de competición actual será muy difícil. Ahora es el momento de encontrar soluciones para saber cómo empezamos y terminamos la próxima temporada, aunque entiendo perfectamente que la Euroliga y la ACB piensen en cómo terminar ésta”.