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Obras (9-4) se juega este miércoles su posibilidad de llegar a la punta de la Zona Sur, cuando reciba desde las 20 horas a Gimnasia de Comodoro en su estadio. Los de Lamas llegan con dos victorias consecutivas, venciendo a Bahía Basket como visitantes y a Quilmes como local, en su más reciente presentación. De ganar, superaría a Argentino en la cima, por porcentaje de victorias.

Para este partido, es posible la vuelta en el local de Selem Safar, quien podría regresar a las canchas luego de perderse los últimos nueve juegos del equipo. Por el que todavía deben seguir esperando es por Iván Basualdo, a quien se espera recién para el encuentro del sábado ante Boca Juniors.

A pesar de las bajas, Lamas ha sacado a relucir la profundidad de su plantel y Obras no las ha sentido particularmente, todavía ubicándose como uno de los conjuntos más efectivos, tanto en ataque, como en el costado defensivo. Donde el regreso de Safar sí puede ser muy importante es con el tema triples, donde hoy el Tachero presenta números algo bajos, con sólo un 33% de eficacia.

Más allá de esto, Obras ha encontrado un excelente rendimiento de su pareja de internos. Marcos Delía (14,4 puntos y 8 rebotes) viene teniendo una temporada de despegue y ahora tendrá la dura tarea de seguir siendo el principal referente ofensivo del equipo, contra un tremendo defensor interior como Sam Clancy. Además, Ramón Clemente se ha adaptado muy bien a su rol (12,6 puntos y 7,5 rebotes) y es una de las piezas fundamentales del rendimiento defensivo de los capitalinos. El perímetro tampoco se queda atrás, con sus tres titulares (Bruno Fitipaldo, Selem Safar y Mauricio Aguiar) promediando en doble dígito.

Por su parte, luego de un flojo comienzo de Liga, Gimnasia (6-6) parece haber enderezado el rumbo, más allá de su reciente y dura derrota ante Boca Juniors, por 78 a 58. La mayor preocupación que generó esa caída, es el tema físico. Los de García lucieron agotados en el cierre de dicho encuentro, anotando apenas seis puntos en el último cuarto y contra Obras, estarán jugando su tercer partido en seis días, algo que puede terminar afectando su producción.

Otro tema para Gimnasia y esto ya es algo repetido en las últimas campañas, son sus problemas para ganar fuera de casa. Mientras que en Comodoro ha logrado ganar cuatro de cinco, como visitante su marca (2-5) es bastante más deficiente y frente a un Obras prácticamente implacable (5-1) como local, la posibilidad de una recuperación, aunque posible, será complicada.

Para empezar a hablar de una levantada, será clave que la visita levante su eficacia en tiros de tres puntos, factor clave de su ofensiva (tiene especialistas como Cavaco, Schattmann, Scala o Aguerre) pero desaparecida en su choque ante Boca (3-21). Lo más fuerte de la defensa de Obras pasa en la zona pintada, por lo que quizás no vayan a tener tantas facilidades para establecer cerca del aro a Clancy y deban recurrir a esos lanzamientos perimetrales, para generar espacios.

Hablando de espacios, veremos qué táctica elige utilizar Gonzalo García esta noche. Mientras que en los últimos partidos viene abriendo con dos pivotes como Pablo Orlietti y Sam Clancy al mismo tiempo, en muchos tramos termina utilizando un ataque abierto, con Federico Aguerre o Diego Cavaco como falsos cuatros, o incluso al recién llegado Kenny Mitchell, quien si bien es ala pivote por naturaleza, juega mucho más en el perímetro que en el area de dos puntos.

En cuanto a individualidades, Sam Clancy lidera al plantel con 13,9 puntos y 13,6 rebotes, mientras que Federico Aguerre (15,1) y Nicolás De Los Santos (14) son sus anotadores más productivos. A la vez, atención con su banco de suplentes, que cuenta con tres jugadores que en los últimos cinco partidos promedian por encima de los ocho puntos: Santiago Scala, Kenny Mitchell y Diego Cavaco.

En el enfrentamiento previo entre ambos, la victoria quedó en manos de Gimnasia, como local, por 86 a 73. En esa oportunidad, Leo Schattmann tuvo su mejor partido de la campaña, anotando 28 puntos, mientras que Clancy terminó con 21 y 12 rebotes.

Más allá de una buena victoria ante Atenas en el medio, Libertad (5-10) está inmerso en una crisis deportiva en este tramo de la 2014/2015, habiendo perdido en nueve de sus últimas diez presentaciones. Actualmente, los dirigidos por Gabriel Piccato aparecen anteúltimos en la Zona Norte y aún con la irregularidad que pasan casi todos los equipos de esa región, lejos de los puestos de privilegio.

El principal problema que afecta a los de Sunchales es en el costado defensivo, donde hoy aparecen como la segunda escuadra más permeable en ese aspecto. Figuran 16° en porcentaje de campo permitido y 17° en rebotes defensivos y aunque sus números totales no son tan malos, esto se debe a su bajo ritmo de posesiones (es el segundo equipo que juega más "lento" del torneo) y no a una eficacia real en la marca. El ataque no va demasiado mejor, pero al menos tiene algunos puntos fuertes como la carga al rebote ofensivo, la buena cantidad de visitas a la línea o sus sólidos porcentajes en tiros de tres.

Con la ausencia de Bruno Barovero por lesión, además, los santafesinos han quedado sumamente desprotegidos en su banco de suplentes y vienen dependiendo excesivamente de la tarea de sus titulares para competir en cada juego. De hecho, si tenemos en cuenta sus más recientes presentaciones, Gastón Essengue es el único relevo que promedia por encima de los 4 tantos y aún así, su continuidad en el equipo no está garantizada.

Quizás la mayor esperanza para Libertad es el reciente rendimiento de Shaquille Johnson, quien se está transformando en la primera opción ofensiva del equipo, promediando 16 unidades durante sus últimas cinco actuaciones. Por otro lado, Alejandro Alloatti sigue apareciendo como líder para la temporada, con 12,5 puntos y 6,4 rebotes por jornada.

Olímpico (6-7), por su parte, llega en alza, luego de una dolorosa derrota ante Regatas por 114 a 75 que parece haber hecho un click en el equipo de Müller. Desde allí, el equipo ha sido otro, sobre todo en el costado defensivo (luego de los 114, pasaron tres partidos seguidos sin recibir más de 66 puntos), algo que les ha permitido ganar cuatro de sus últimos cinco encuentros.

Para los de La Banda el juego de esta noche es fundamental, no sólo para confirmar su mejoría, sino también para seguir prendido en la lucha por conseguir uno de los boletos directos al Super 8, situación que por la inconsistencia de la Zona Norte, todavía es más que posible.

En su levantada del mes de noviembre, Olímpico ha tenido a dos protagonistas principales: Juan Brussino (16,8 puntos en noviembre) y Lee Roberts (18,8 puntos y 8 rebotes en ese mismo mes), quienes han cargado con un ataque que está rindiendo bastante por encima de lo esperado. De hecho, ambos son claves, cada uno en su función, para las dos virtudes más importantes en ofensiva de los santiagueños: el cuidado de pelota (segundos que menos la pierden en la LNB) y la carga al rebote ofensivo (mejores de la Liga en ese aspecto). Este último apartado puede ser desequilibrante esta noche, si tenemos en cuenta los mencionados problemas de Libertad para asegurar su tablero propio.

Olímpico tardó bastante en adaptarse a la baja de Ariel Pau y todo su aporte goleador, mientras que su reemplazante, Sebastián Picton, todavía no terminó de encontrar su lugar en el plantel. Sin embargo, de a poco parece que los de Müller han conseguido una identidad de juego definida y se han transformado en un equipo peligroso para cualquiera que tenga del otro lado.

En el primer choque de la campaña entre ambos conjuntos, la victoria quedó en manos de Olímpico por 71 a 65, tras una gran presentación de sus figuras extranjeras: Jesse Pellot sumó 23 y Lee Roberts 22, con 6 rebotes de ataque y 14 totales.

Luego de pasar su mejor seguidilla de partidos del torneo, venciendo a Ciclista y Quilmes de forma consecutiva, Lanús (4-9) volvió a decepcionar el pasado viernes, cayendo por un ampio 95 a 71 en Comodoro Rivadavia, ante Gimnasia. Los de Vecchio aparecen anteúltimos en la Zona Sur y deben cambiar muchos aspectos de su juego para modificar el rumbo de la temporada.

En lo que más debe trabajar el entrenador granate es en el costado defensivo, apareciendo hoy como la defensa más floja del torneo, por un buen margen númerico por encima de la segunda peor. Durante sus victorias ante Ciclista y Quilmes el equipo permitió apenas 67,5 tantos, pero ante Gimnasia, volvió a perder la concentración e intensidad en la marca. Para vencer a un Boca peligroso con el aro, deben volver a recobrar esa dedicación que les trajo buenos resultados.

En ese sentido, debería ser importante el arribo del pivote Assane Sene y sus 2,13 de estatura. El senegalés intentará darle otra presencia interior al equipo, en un cupo en el que Vecchio todavía no ha encontrado a su hombre, ya sea por lesión (Collins) o rendimiento (García).

Por momentos, Lanús se ha mostrado como un equipo ciertamente anárquico en la temporada, tal cual lo refleja el hecho de ser el que menor cantidad de goles de campo asistidos consigue por juego. Los bonaerenses juegan en ataque para dos hombres: Nicolás Romano, de tremenda temporada anotadora (24,5 puntos) y Lorrenzo Wade (16) pero debe ganar en movimiento de balón y básquet colectivo, algo que se ve complicado por el estilo de juego de su base, Camontae Griffin, quien mira mucho más el aro que a sus compañeros.

Boca (5-7) llega al Rotili intentando mantener una regularidad que le ha costado conseguir a lo largo del torneo. Es cierto que luego de su pésimo arranque de 0-5, los de Córdoba han mejorado muchísimo, tanto en la Liga Nacional, como en la Sudamericana, pero aún así, todavía tienen varias cosas por corregir, como sus problemas para mantener ventajas importantes o el excesivo utilizamiento del tiro de tres.

Por las características de su corto plantel, es lógico que el Xeneize tenga al triple como su principal arma, pero en ese sentido ha mostrado dos caras en la temporada: una, positiva, cuando los tiros llegan producto de un interesante movimiento de pelota, que muchas veces incluyen a sus hombres grandes como pasadores; y otra, negativa, que tiene que ver con la falta de ideas y el abuso del lanzamiento perimetral como una opción salvadora. Cuando Boca se pasa el balón y busca al tirador abierto, ha demostrado ser un conjunto peligroso. Cuando no, es capaz de perder con cualquiera.

Defensivamente, donde los capitalinos han estado algo irregulares en la temporada, hay un par de desafíos claros para Ronaldo Córdoba: el primero es la marca de Nicolás Romano. En el primer choque se lo contuvo muy bien sacando de titular a un especialista en la marca, como Axel Weigand, normalmente en el banco de suplentes. La segunda, es que sí se utiliza a Weigand con Romano, la defensa de Wade quedará desprotegida. Sosa no parece tener la altura para marcar al norteamericano y Ramírez Barrios la velocidad, por lo que habrá que ver que decide el cuerpo técnico Xeneize de cara a esta noche. Una opción: utilizar al juvenil Lucas Gargallo, quien si bien no aporta tanto en ataque, ha mostrado ser uno de los mejores marcadores externos del plantel.

En el otro costado, será clave la tarea de Isaac Sosa. En los partidos ganados por Boca, el boricua promedia 15,3 puntos y un 52% en triples. En las derrotas: apenas 9,6 y un 33% en tiros perimetrales. Su labor suele decidir la suerte de su equipo y ante Lanús, jugando como visitante, se espera un importante aporte de su parte.

Como ya mencionamos, estos dos conjuntos se vieron las caras en una ocasión durante la 2014/2015, quedando la victoria en manos de Lanús por 66 a 64, gracias a un doble agónico de parte de Tyler Field, en lo que en ese momento fue la quinta caída al hilo para Boca.

Para cerrar la jornada y con televisación de TyC Sports, Regatas (12-1) recibe en Corrientes a Atenas, intentando mantener su sensacional paso en la campaña y su liderazgo en la Zona Norte. La racha de 11 triunfos seguidos de parte de Quimsa le ha puesto presión a los de Casalanguida, que de todas maneras han respondido con su propia seguidilla de triunfos (7), la cual intentarán extender este miércoles.

La superioridad de Regatas en sus últimas presentaciones ha sido realmente notable, ganando sus últimos cuatro juegos por un promedio de 24,5 puntos. El finalista de las últimas dos temporadas LNB se viene mostrando más sólido que nunca, con un ataque imparable repleto de opciones, una defensa en alza y un juego en conjunto notable.

Los correntinos tienen opciones de gol en todos los puestos y desde todas las posiciones del campo. Cuentan con cinco jugadores distintos promediando en doble dígito y siete de ellos, llegan a los 8 tantos por encuentro. Tienen tiradores, buenos pasadores, un gran banco, jugadores de contragolpe, de 1 vs 1 y la llegada de Hakeem Rollins les ha dado, también, una referencia en el juego de poste bajo.

Rolllins ha jugado justamente esos cuatro partidos en los que Regatas no le dio ninguna opción a sus rivales y parece haber complementado de forma perfecta al resto del plantel. Seguramente las tenga y vayan a aparecer a lo largo del año, pero hoy, es complicado encontrar un punto flojo en un Regatas que cada vez se perfila un poco más como el máximo candidato de la competencia.

Atenas, por otra parte, llega con marca de 6-8 y aunque todavía tiene expectativas de ingreso al Super 8, no puede dejar pasar más oportunidades. Su reciente triunfo ante San Martín fue importante en ese sentido, pero ahora tendrán que ir a Corrientes a buscar dar la sorpresa.

En el último encuentro, los de D´Angelo tuvieron la buena noticia del regreso a los campos de Bruno Lábaque, pero la alegría no pudo ser completa, al perder a Luciano González (no viajó a Corrientes) por un esguince de tobillo. El tema lesiones ha afectado a los cordobeses durante toda la primera fase y este miércoles, deberán seguir lidiando con ello.

Defensivamente Atenas tendrá varios desafíos para este encuentro, con todo lo que implica para la quinta defensa menos eficaz del torneo, visitar al mejor ataque de la competencia, encima en su propia casa. Está claro, que sobre todo sin el goleo de González (11,6), el Griego tiene que encontrar la manera de frenar, o al menos contener, el caudal de puntos del rival.

Regatas tiene una importante ventaja de, ya sea velocidad o físico, en casi todas las posiciones entre los iniciales, por lo que los de D´Angelo, además de la marca, tienen que apostar a un buen movimiento de pelota, una alta eficacia con el triple y a ofensivas abiertas. En este sentido, es positivo para ellos el contar con cinco titulares con buen talento técnico y la capacidad para jugar de frente al aro, aunque veremos hasta que punto esto termina influyendo.

El primer partido entre ambos fue uno de los triunfos más cerrados de Regatas en el año, imponiéndose en Córdoba por 83 a 79, con una noche estelar de Paolo Quinteros (29 puntos).