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Olimpo se metió mucho más de lleno en el plano nacional y este domingo se convirtió en el segundo equipo ascendido al TNA en esta 2014/15. El equipo bahiense logró un objetivo que a principio no estaba en los planes, pero con el correr de los partidos ha logrado ir asentado su posición y ha elevado su chapa de candidato hasta llegar a la gran consagración. Un grupo de jóvenes, con algunos referentes bien marcados y dentro de una ciudad que vive del básquet siendo la cuna de varios jugadores históricos.

Marcelo Piuma ha sido uno de los grandes símbolos de Olimpo. El pivote de 31 años fue un referente dentro y fuera de la cancha, terminó con 14 puntos y fue el segundo máximo artillero que tuvo el equipo en el partido definitorio de la serie ante Platense (el goleador fue Juan Pablo Morán con 21). En diálogo con Básquet Plus, el bonaerense contó sus sensaciones tras la consagración de su equipo, analizó su rol dentro del grupo de trabajo y habló sobre el futuro.

- Contame un poco qué sensaciones te invaden en este momento.

. La verdad es que estoy muy contento, se logró lo que se quería que era ascender al TNA. Ahora todavía nos queda jugar el cuadrangular final, un poco más relajados aunque obviamente ahora queremos ganar todo. Pero ahora vamos a festejar todo esto. Anoche se terminó de coronar lo que siempre uno busca, ascender, y la verdad es que superó todas las expectativas que había.

- Corregime si me equivoco, pero quizás el objetivo inicial de la temporada no apuntaba tan alto. ¿Cómo fue ese proceso?

. No, el objetivo a principios de temporada no era ese. Cuando vine la expectativa era otra, en los dirigentes y con el equipo que se había formado la idea quizás pasaba un poco por conocer la categoría y no descender. Ya para el otro año sí, armar un equipo con una meta más alta. Pero a medida que fueron pasando los partidos del torneo el equipo se fue afianzando y agarrando confianza. Todos nos empezamos a ilusionar cuando eso pasó y se pudo ver en todos, tanto en los mismos chicos, como en los dirigentes y la gente que nos siguió.

- Calculo que siendo el jugador más experimentado del plantel tuviste un rol clave en el día a día. ¿Qué tan bien manejaste ese liderazgo sabiendo que el torneo es largo y que tenías que ser esa gran guía para los pibes?

. Es como decís, era un equipo totalmente joven con chicos que quizás era la primera vez que iban a jugar un torneo de nivel nacional. Te admito que por momentos, al principio, fue difícil manejarlo por eso mismo de que son bastante chicos. Me pasó que a veces les gritaba para corregir cosas y eso jugaba en contra porque se bajoneaban. Eran cosas de los partidos, porque los podía putear pero después estaba todo bien y eso pasaba porque soy un jugador un poco temperamental. Pero a medida que fueron pasando los partidos me fueron conociendo y armamos un grupo lindo, fue fundamental armar un buen grupo como este para haber llegado hasta acá. Además se jugó muy bien.

- De todas formas cuando Olimpo te contrata también es para eso. No solo por un rendimiento deportivo sino también por el roce que tenés y el ayudar a que los chicos entiendan el mensaje de trabajar duro.

. Sí, cuando me llamaron y arreglé acá la idea era un poco esa, que le pueda dar una identidad al equipo. Me contaron que iban a ser chicos jóvenes y que tenía que tratar de enseñarles cosas, por momentos me lo tomé en serio (risas). Este es un torneo muy duro y largo, y eso lleva a que uno tenga que tener momentos para todo: para jugar bien como estos chicos realmente lo hacen y para raspar un poco, que era lo que les decía. La verdad es que lo entendieron bien y se fueron acomodando. Esas fueron las cosas más importantes, que se jugó bien en todo el torneo y que se pudo conseguir todo lo de anoche, ante nuestra gente.

- ¿Qué te significa este ascenso?

. Más vale que es algo súper importante. Por ahí uno todavía no cae bien porque lo anoche es muy reciente, con el correr de los días se va a entender un poco más todo lo que significa. Para un jugador como yo que hace muchísimos años juega este torneo esto va a ser diferente que para el resto de los chicos, que seguro van a poder vivir esto muchas veces más porque tener 18 o 20 años y conseguir un ascenso no es algo que pase seguido. Esto a mí me llena muchísimo, trasciende y va a quedar en el recuerdo. Estoy feliz, también porque este es un club donde no se juega hace tanto a nivel nacional y en una ciudad como Bahía Blanca donde se respira mucho básquet.

- ¿Qué tan importante fue ganar ese primer punto de la serie en Platense?

. Esa noche tuvimos una efectividad tremenda, son partidos que quizás no se dan siempre pero son los que tenés que ganar y por suerte se logró. Para nosotros era importante ganar uno de los dos primeros partidos en Platense porque ellos son un equipo muy bueno. Llevar la serie a un quinto partido, jugando allá y con la ventaja para ellos hubiera sido terrible. Pero se logró, como así también lo hicimos en la serie contra Gimnasia, tuvimos ese acierto y además defendimos bien que creo que esa es una de las características fuertes de este equipo. Tratamos de defender siempre, uno después puede tener una buena o mala noche atacando pero la idea de visitante siempre está en defender y mantenernos ahí, porque sabemos que en casa estuvimos fuertes durante toda la temporada.

- Tengo entendido que las intenciones de Olimpo para el año próximo serán formarse bien pensando en el TNA. ¿Ya se habló algo de tu situación a futuro?

. No, todavía no se habló nada, supongo que el torneo lo van a querer jugar, sí. Por ahora veremos qué pasa en estos días, todavía tenemos que jugar el cuadrangular final y después nos sentaremos a hablar con mi representante. Yo me he sentido muy bien acá, toda la gente de acá me ha tratado muy bien y estoy cómodo. Pero todavía no hablé nada, después del torneo me voy a ir a la Liga de Paraguay unos dos o tres meses y después se verá. A mi me gustaría continuar en Olimpo.

- Explicame cómo fue el final del partido, porque te quedaste afuera por acumulación de faltas y me imagino que habrás vivido un cierre infartante desde el banco.

. Sí, ni te cuento. Fue en un rebote, hice una falta tonta y me olvidé que tenía cuatro, y el banco tampoco tenía en mente la cuenta por toda la euforia que estábamos viviendo. Fue tremendo el final, verlo desde afuera fue increíble, me costó mucho y pasé los últimos cinco minutos más largos de mi vida. Pero por suerte los chicos lo hicieron bárbaro, es un grupo joven con muchísimo talento y pensá que cerramos el partido con un equipo donde había pibes de 18 años.

- Ya te podés recibir de maestro entonces...

. (Risas) Sí, ahora sí. La verdad es que jugaron bárbaro, no tuvieron miedo ni dudaron a la hora de tirarla y se animaron a todo estando en esa situación donde cualquiera se podía poner nervioso. Es un grupo de chicos con muchísimo talento, muy bueno, todos van a crecer mucho y tienen un futuro bárbaro.

Lucas Leiva / [email protected]

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