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Tanto por el ritmo arrollador de San Lorenzo y los vaivenes de Boca durante la Fase Regular de la Liga Nacional, el cruce entre ambos pintaba accesible para el tricampeón. Pero el equipo de Guillermo Narvarte sacó a relucir el oficio que le aportaban jugadores como Adrián Boccia y forzó el quinto juego. Al compromiso que era a todo o nada, Nicolás Aguirre llegó con problemas en su físico.

A pesar de la dolencia, el base jugó 36 minutos y alcanzó los 200 partidos jugados con la camiseta azulgrana en la Liga Nacional. El primero en alcanzar la cifra fue otro de los lideres espirituales y basquetbolísticos de San Lorenzo: Marcos Mata. Aguirre dio 2 asistencias, bajó un rebote, pero lo más importante estuvo desde el aporte emotivo. Por ejemplo este triple –sus únicos puntos en el partido– en el momento en que Boca se había acercado a un doble (56-54) en el cuarto final:

 La jugada clave del partido fue auspiciada por el @penkaguirre7. @BocaJrsOficial se había puesto a dos puntos pero el número 7 clavó este bombazo desde la esquina  pic.twitter.com/Or36NcVXCR

— CASLA Básquet  (@CASLABasquet) 7 de junio de 2019

La importancia que tiene que el capitán del equipo y Marcos Mata hayan hecho un gran esfuerzo para estar dentro de la cancha fue resaltada por sus compañeros. Mathias Calfani lo dejó en claro en diálogo con Básquet Plus: “Para nosotros que ellos hagan el esfuerzo que están haciendo para estar, sabiendo que ellos son los pilares de este equipo, es importante. Ellos son los que guían para ganar tantos títulos acá. Son los que aparecen en los momentos difíciles”. Sin dudas, fue una noche redonda para Aguirre y todo San Lorenzo.