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Luego de una gran 2017/18, había enormes expectativas depositadas en los Boston Celtics para este año, sobre todo con el regreso de Gordon Hayward a la alineación. Sin embargo, los de Stevens hasta el momento no han podido recuperar el nivel de la campaña anterior y les ha costado encontrar una identidad de juego.

Tras sumar una nueva derrota en casa, por 120-107 ante los Milwaukee Bucks, el plantel de los Celtics tuvo una reunión a puertas cerradas, solamente con los jugadores presentes. ¿Los motivos? Marcar los problemas que viene teniendo el equipo, sobre todo ligados al egoísmo. Así lo contó Kyrie Irving.

"Tenemos inconsistencias. Hay que confiar en el pase, en lo que tenemos en cancha en cada momento. Obviamente estamos teniendo un juego egoísta... tenemos jugadores muy talentosos, pero sabemos que seríamos mejor equipo si compartiéramos el balón".

"Para ser honesto, no estoy teniendo los minutos o el rol que quisiera, desde un punto de vista egoísta. Pero hay que ser paciente, para poder crecer como un líder del equipo y ayudar a estos jóvenes a prepararse a lo que se van a encontrar cuando crezcan en esta liga. El éxito pasa por lo que hagamos como equipo", cerró Irving.