Le salió en contra: absurdo sabotaje de Chris Paul a Curry en el Toyota Center
21:21 13/05/2019 | El base de los Rockets impidió que la estrella de los Warriors realizara una rutina de tiro que había coordinado previamente.
Los playoffs de la NBA están repletos de historias surrealistas. No solamente durante los partidos, sino que también antes y después de los mismos. Sin ir más lejos, el Juego 7 entre Raptors y Sixers se definió con un tiro ganador y el autor fue Kawhi Leonard; su golazo desde la esquina y con la marca encima decretó el 92-90 de Toronto resultado que mandó a Joel Embiid al vestuario con lágrimas en los ojos y a los ganadores a las Finales del Este.
Pero también existen historias extradeportivas interesantes. En la otra Conferencia, en el marco de la previa al Juego 6 entre Rockets y Warriors, Chris Paul y Stephen Curry protagonizaron una de ellas. Las sensaciones del armador de Golden State no venían siendo las mejores a lo largo de la serie, por eso (a través del jefe de equipo) había coordinado para tener una hora de rutina de tiro en el mismo Toyota Center, estadio de Houston. Solamente él y la pelota. Logró dicha habilitación para el horario comprendido las 19:00 y las 20:00 de ese viernes 10 de mayo, pero cuando se presentó en el estadio nada se desarrolló como lo había planeado.
Chris Paul, al enterarse de esta situación, se decidió a sabotear el entrenamiento de Curry rozando una actitud antideportiva burda. Por esta razón, cuando la estrella de Golden State ingresó al Toyota Center se encontró con CP3. Según un informe de The Athletic, Curry le preguntó si podían compartir el parqué, cada cual en uno de los aros, pero la respuesta del dueño de casa fue siempre negativa. Curry se fue del estadio sin haber podido realizar un solo tiro de la rutina que había programado.
La estrategia de Chris Paul le rindió sus frutos a los Rockets en el comienzo del partido, ya que Steph Curry se fue al entretiempo sin haber podido anotar ni un solo puntos. Pero todo se volvió en contra en el complemento: de por sí, Curry es uno de los mejores jugadores de la NBA y su talento crece aún más en momentos cúlmines; así como también cuando se enoja, como lo demostró en esa segunda mitad. Totalizó 33 puntos, 23 de los cuales llegaron en el último cuarto, para transformarse en el principal motor de la victoria 118-113 de Golden State en Houston. Así, aun sin Kevin Durant, pudieron estampar el 4-2 en la serie y sellar la clasificación a las finales del Oeste. "Sacame ahora de la cancha", se pudo escuchar en el vesturio ganador.