NBA

Julius Erving y uno de los mejores movimientos de la historia

13:42 11/05/2020 | Durante las Finales de 1980 entre Philadelphia 76ers y Los Ángeles Lakers, el legendario alero realizó una jugada que es considerada como una de las más espectaculares que se hayan visto en la liga. Se cumplen 40 años de aquella acción.

Erving y la famosa jugada. (Foto: Jim Cummin)

"Aquí estaba, tratando de ganar un campeonato y me quedé boquiabierto. Pensé, '¿Qué deberíamos hacer? ¿Deberíamos sacar la pelota o deberíamos pedirle que lo vuelva a hacer?'", declaró un tal Magic Johnson años después de aquel partido. La razón detrás del asombro del MVP de esas Finales entre Los Ángeles Laker y Philadelphia 76ers fue un movimiento de uno de los jugadores más espectaculares y vistosos que dio la NBA: Julius Erving. Un nuevo aniversario de aquella jornada sirve para recordar semejante acción.

Ocurrió en el cuarto partido de la serie decisiva de 1980. Con los Lakers una victoria por encima de sus 76ers, el Dr. J tomó el control del encuentro. Anotó 23 puntos, bajó 5 rebotes y repartió 3 asistencias, pero su injerencia en el desarrollo del juego fue más allá de las estadísticas. Ese dominio quedó demostrado en un ataque que se grabó a fuego en la memoria de todos los presentes: Erving rebasó a Mark Landsberger por el costado derecho de la cancha, llegó a la línea de fondo y tomó impulso. Al saltar, se encontró en el aire con la presencia de Kareem Abdul-Jabbar. Y allí, entre los brazos de ambos defensores, sacó a relucir toda su magia. Con un traslado elegante, escurrió la pelota entre ellos y se las ingenió para encestar una bandeja a canasto pasado que impresionó a propios y extraños.

"Fue una de las tres mejores jugadas que vi en mi vida, junto con la de Michael Jordan en las Finales de 1991 y esa que MJ hizo en el entrenamiento previo a los Juegos Olímpicos de Barcelona", resumió Magic durante una entrevista en 2017. Que un rival hable así no resulta extraño cuando se trata de la figura del Dr J. Para muchos el hombre más revolucionario en la historia de la NBA, el alero fue capaz de hacer cosas que parecían imposibles para un jugador de su tamaño. Estableció un estilo que le abrió el camino a futuras leyendas como Michael Jordan y se ganó el respeto de toda la comunidad por su trato gentil.

Philadelphia se llevó el triunfo en aquel partido por 105-102, pero perdió las Finales en seis a causa de una actuación inolvidable de Johnson. Siendo apenas un novato, el base ocupó casi todas las posiciones para reemplazar la ausencia de Abdul-Jabbar en el último cotejo y se metió de lleno en los libros de historia de la liga. Sin embargo, ningún resultado adverso podrá borrar el impacto que aquel movimiento de Erving tuvo en el imaginario popular. Uno que sólo se puede definir con precisión a través de otra frase soltada por Magic: "Cuando la grandeza conoció a la clase, ahí fue cuando se creó el Dr J."

 

 

Compartir