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Luciano González es uno de los tantos jugadores de la Liga Nacional que decidieron emigrar hacia otras competencias ante los problemas económicos y deportivos que ha generado la pandemia del Coronavirus en el país. En díalogo con Básquet Plus, el perimetral se refirió al proceso que vivió para tomar esa determinación de irse a jugar al Flamengo de Brasil, analizó el presente del deporte en la Argentina y explicó las posibilidades que baraja para su futuro.

-Formalmente, sos el primero que se sabe que no va a poder jugar la Liga Nacional porque la NBB de Brasil va a jugarse entera. ¿Por qué tomaste la decisión?

. Sí, salvo algo extraño no tengo posibilidades de retorno a la Liga. A medida que todo se fue sucediendo desde que se suspendió el torneo, yo tenía sólo un año de contrato con San Lorenzo y veía cómo estaba pasando todo. Ya me empecé a dar cuenta de que el mercado iba a estar un poco quieto acá. Cuando se canceló la temporada y apareció lo de Flamengo, le dimos la prioridad. Considero que es un club importantísimo a nivel continental y además ya está en la final de la BCLA. Tiene aspiraciones muy grandes para esta temporada. Por suerte salió todo bien.

-Si San Lorenzo le gana a Quimsa, vas a ser campeón de la BCLA antes de que se juegue la final.

. Claro, con cualquiera de los dos equipos. Jugué el noventa porciento del torneo con San Lorenzo y sólo voy a jugar la final con Flamengo. De hecho, no sabía si podía jugarla pero finalmente sí es posible. Va a ser una situación bastante extraña, pero bueno.

-Están armando un equipo como para salir campeones del mundo...

. El equipo tiene esa ambición de jugar el Mundial de Clubes y de salir campeón de América. Ya estamos clasificados a la siguiente edición de la BCLA. Ese es el lema de la institución: volver a conquistar el continente y estar peleando a nivel intercontinental. Es un desafío hermoso, algo muy similar a lo que nos estaba pasando con San Lorenzo en la temporada pasada.

-¿Te quedaste con ganas en San Lorenzo?

. Sí, porque estábamos a un partido de la final de la BCLA, ya habíamos ganado el Súper 20 y sentíamos que el equipo estaba creciendo para llegar a las instancias definitorias de la mejor manera. Cuando todo se suspendió me dio un poquito de bronca, pero ya lo procesé y estoy con la cabeza en otro lado.

- Si te pido que ordenes los motivos por los que te vas, no me vas a negar que hay una cuestión económica.

. Sin dudas y es la realidad que nos toca pasar como país. A todos los jugadores nos está ocurriendo lo mismo. Pero bueno, hay un éxodo enorme en este año y algo bastante llamativo.

- Pero no es ilógico lo que está pasando...

. No, pero antes se veía un poquito más de resistencia desde los clubes para intentar retener a los jugadores. La verdad que este año eso no lo vi. Con los chicos que he hablado, las propuestas que tenían eran todas del exterior y nada de acá.

- De alguna manera, eso sí tiene lógica. Si no sabés cuántos meses va a tener la Liga, es medio difícil que salgas a un mercado, ¿no?

. Sin dudas. Nadie sabía bien cómo iba a ser la competencia acá así que ya empezás a mirar para otros lados que tienen las cosas más claras. Ves que el mercado se va abriendo para muchos jugadores y los que tenemos la posibilidad de hacerlo estamos optando por eso. Es hacer experiencia en lugar es nuevos. Están yendo muchos chicos a México que era un lugar al que no iban tantos argentinos. Se están abriendo nuevas puertas.

-¿Te vas idea de volver o para ver qué pasa allá?

. Me voy con la idea de estar este año en Brasil. Yo ya estuve y es una liga a la que quería volver a jugar. Lo que pasa es que Instituto y San Lorenzo eran equipos muy competitivos y me daba ganas de quedarme a jugar la Liga. Por todo esto de ahora y por el hecho de que sea Flamengo, es un buen momento para irme. Después, veré cómo me va este año. Tengo la posibilidad de hacerme la ciudadanía brasileña también, así que tengo que ver cómo lo tramitaré a todo eso.

- Para aclararlo: es por tu abuela y no por tu mamá.

. Claro, ella es brasileña. Toda mi familia por parte de mi abuela está allá en Brasil. Los únicos que estábamos acá somos mi vieja, mi abuela y nosotros. Mis primos y todos los demás están en territorio brasileño.

-Deportivamente, ¿te atrae? Más allá de Flamengo, vos vas a jugar una liga que también va a sufrir los coletazos de la crisis que hay en general.

. Sí, puede ser. Pero, por lo que he visto en este último tiempo y por cómo se están armando algunos equipos, hay varios que lo hicieron bien. Son cuatro o cinco, los de siempre. Seguramente habrá otros clubes que quizás lo sufran, otros que no. Siento que en la Liga Nacional se va a sentir muchísimo más. Yo quería estar en un lugar lo más competitivo posible.

-¿Puede ser que haya un efecto de autocontagio en esto de irse?

. Puede ser que algunos chicos por ahí estaban en duda y, al ver que varios han tomado la determinación de irse afuera, encontraron el empujoncito que necesitaban. Algunos están yendo a jugar a Uruguay un par de meses y quizás se quedan o no. Me imagino que habrá un par más de argentinos en Brasil y esos no van a volver a la Liga. Indudablemente vamos a ser varios los que nos vamos.

- Económicamente, ¿se agrandó mucho la brecha con la Argentina?

. No lo sé porque no conozco la realidad de cuánto me pagarían en Argentina. No sé dónde está parado contractualmente el país, pero calculo que está bastante lejos. Es pura y exclusivamente por el dólar. Pero, como te digo, no sé cómo estarán los clubes ahora a la hora de pagar.

-¿Manejaste la chance de ir a jugar a Europa, aunque sea a una segunda categoría?

. La verdad que no. Me hubiera encantado. Cuando era chico, intenté tramitar la ciudadanía para hacerme comunitario y no se me dio. Sé que es muy difícil jugar como extranjero allá, así que siempre fue algo bastante distante. Se me dio la chance de estar en los mejores equipos de la Argentina, pelear cosas. Ahora me salió esto de Flamengo y es como que siempre está muy lejana la idea de irme a Europa.

-¿Estabas angustiado sobre el futuro inmediato por todo lo que tiene que ver con la pandemia? No sólo no jugar, sino también las reuniones, no poder verse con amigos o familia...

. Los primeros dos meses era una mezcla. Descansaba un poco, pero no podía hacer nada y tenía que estar encerrado, no sabía cuándo ibamos a volver a jugar. Después, se canceló la Liga. Acá en Paraná, hubo un momento en el que se abrieron varias actividades. Ahora se volvió para atrás, pero tuve la posibilidad de reunirme y de ver a mi familia. Ya no podemos. Volver a jugar con público lo veo súper lejano. No sé cómo serán los protocolos en Brasil. Desde que estoy acá en Paraná, no pude ir a una cancha.

-¿Te salta el hecho de pensar que antes nos quejábamos de la vida anterior y ahora la extrañamos?

. A veces no tanto porque me agarró en una edad en la que ya pude hacer muchas cosas. No me estoy perdiendo de nada que no haya hecho, pero me hubiera encantado invertir este tiempo en otras cosas. Estoy en mi casa en el campo que me encanta, la disfruto un montón, pero me hubiera gustado estar de receso. Poder irme de vacaciones, estar con familiares y amigos de otra manera. Estamos todos en la misma y viendo cómo nos acomodamos.

- Habrás hablado con Franco Balbi. Una media cancha picante...

. Sí, claro que hablé. Lo conozco desde hace mucho, de enfrentarlo. Nunca habíamos compartido equipo, pero lo conozco hace bastante. Me comuniqué con él y me dijo que le hablara para lo que necesite. Le hice un par de preguntas lógicas porque no conozco tanto el club ni la ciudad, pero dentro de poco estaremos allá.

-¿Te asusta cómo está Brasil con el tema del virus o, al ir solo, no te preocupa tanto?

. No me preocupa porque no difiere en nada de las medidas de prevención que tomo acá. Estoy muy acostumbrado a cuidarme. Mi vida no va a cambiar mucho en cuanto a la rutina. Seguramente nos darán los mismos consejos y por un tiempo será eso. Saldré a caminar como salgo acá y no mucho más.

Fabián García / [email protected]
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