Gisela Vega: "Mi desafío es volver mejor que nunca"
09:57 09/12/2014 | Tras operarse de la rotura de ligamentos sufrida en el último Sudamericano, la entrerriana se recupera de su lesión y ansía con su retorno a la actividad.
Durante la disputa del XXXIV Campeonato Sudamericano de categoría Mayores que se llevó a cabo en Ambato (Ecuador) y en el cual Argentina obtuvo la medalla de Plata al caer en la final ante Brasil, Gisela Vega sufrió la rotura de los ligamentos de su rodilla izquierda. Por primera vez desde el 16 de Agosto habló con la prensa sobre su lesión.
El Sudamericano había despertado gran expectativa para los seguidores del básquet femenino en nuestro país, Argentina venía de salir campeón en los Juegos Odesur (sin la presencia de Brasil) y pese a no haber podido clasificar al Campeonato Mundial en el FIBA Américas Xalapa 2013, el cuerpo técnico encabezado por Cristian Santander venía llevando a cabo un buen trabajo y la diferencia con Brasil se iba limando, al llegar al punto que previo al Sudamericano Mendoza 2013 se le había ganado un amistoso y en los partidos oficiales (final de dicho torneo y en Xalapa), se había estado muy cerca de ganar.
Las expectativas eran muchas, era una gran oportunidad para cortar con la supremacía de Brasil, Argentina llegaba con un buen rodaje, un buen funcionamiento y muchas individuales en gran nivel. Pero la suerte volvió a serle esquiva.
Le costó entrar en ritmo, pero con el correr de los partidos el equipo se fue aceitando y afianzando y eso hacía que las expectativas creciesen. Pero en el último partido de la fase de grupos, pasó lo peor, lo que nadie se esperaba ni se imaginaba, en una jugada pava Gisela Vega ensayó un giro, su cuerpo lo hizo, pero su rodilla no. La entrerriana, jugadora fuerte que no suele simular, mostraba rasgos de dolor y la duda y la incertidumbre por suponerse lo peor nos invadió a todos los presentes.
Con el correr de las horas, la noticia que ninguno queríamos escuchar, se confirmaba. La pívot sufrió la rotura de los ligamentos de su rodilla izquierda. ¿Se le podía ganar a Brasil todavía? Por supuesto, pero sin ella sería difícil, sumado al shock que causó en sus compañeras.
Hoy, desde su "nuevo" hogar, instalada en Buenos Aires en donde se encuentra realizando la rehabilitación de su operación, se tomó un rato y rompió el silencio luego de la lesión y dialogó con CABB.com.ar sobre todo. Auténtica, abierta y jodona, como siempre.
Gisela en este momento ya comenzó a realizar movimientos y dejó el reposo absoluto. Así lo contó ella, "estoy en la etapa de fortalecer mucho la rodilla y si Dios quiere el 17 me ve el doctor que me operó y dentro de un mes podría empezar a trotar. Esta etapa de fortalecimiento es para que cuando empiece a correr y a hacer cosas más jugadas, de mayor fuerza, la rodilla esté bien fuerte y no corra riesgo de ningún tipo. Estoy en una etapa mejor, más activa y me gusta mucho más porque puedo hacer ejercicios y movimientos".
La entrerriana, jugadora de porte, grandota y pesada, nunca había sufrido lesiones de gravedad en su carrera, en la cual enfrentó a las mejores pivotes del mundo, pero hoy tiene delante a un rival muy difícil. "Fue la primera lesión importante de mi carrera y llegó en un momento bastante inesperado, más allá que estas cosas no se esperan, pero tenía un desafío muy importante, ya había fichado en un equipo que habían confiado en mí desde muy temprano en la temporada y yo estaba muy contenta por eso. Todo lo que hacía con la Selección, los entrenamientos eran como para estar a la altura siempre". Ella es una jugadora con mucha fortaleza mental, con lo cual pudo superar el difícil trance, sumado al apoyo de gran cantidad de gente y así lo contaba "la verdad que me dolió pero no me costó levantarme, lo que más me costó fue cuando no podía caminar por el reposo porque yo soy muy inquieta, pero tuve mucho cariño, mucho amor de la gente que quiero y de gente que ni me esperaba y sinceramente eso no me hacía mirar para atrás, al contrario, miraba para adelante y decía, "esto no me puede a mi" y más allá de que yo siempre me destaqué por ser muy fuerte y luchadora, este era el momento en el cual más tenía que demostrar que tengo que ser fuerte. Gracias a mucha gente que a veces uno no se da cuenta que la tiene al lado, pero está al lado tuyo en el momento difícil de tu vida a nivel personal, no solo en lo deportivo, así que eso me hizo levantar cabeza y estar ahora en el momento que estoy".
Pese a su fortalece mental, la interna sabe que estar bien de la cabeza será fundamental para encarar lo que viene, por eso sostiene que también trabaja en ello. "Ahora mismo estoy, además de fortaleciendo mi rodilla, fortaleciendo mi cabeza también y saber que viene la etapa de trabajar muy duro y que si hay dolor o hay cosas que uno no puede hacer de las que estaba acostumbrado, tener paciencia, tranquilidad y con el tiempo se va a lograr, digamos que hay que empezar de cero no solo con la pierna, sino que en los movimientos, en la preparación física también. Los sentimientos son todos positivos mirando para adelante. Hay unos compromisos muy importantes y muy desafiantes para este 2015 con la Selección y me encantaría lograrlos, más allá de lo que ya logramos en el 2014. Tengo que levantar la cabeza y entrenarme para volver mejor que nunca, que ese es mi desafío. Recuperar lo que en cierta manera perdí que es como una cuenta pendiente para mí, pero tengo confianza en mi trabajo y que voy a luchar día a día para lograr los objetivos con la Selección y el contrato que me hubiese gustado vivir este año".
"La verdad que no tengo ansiedad, no tengo apuro. Lo tomo como que ya pasó, lo asumí así, más allá de que llegó en ese momento tan inesperado, yo lo que quería era operarme y llegar a la etapa de entrenar que es en la cual estoy ahora. No me preocupo por jugar o por agarrar una pelota, no estoy ansiosa, no voy al médico y le pregunto cuanto falta, cuando vuelvo, voy paso a paso. La verdad que lo asimilé bien. Lloré dos días seguidos, vos sabés porque vos estabas ahí en Ambato, cuando pasó es como que fue un shock, me di permiso para llorar esos dos días seguidos y después ya no me lo permití más. Tengo que reconocer que me gusta entrenar, me gustan los desafíos, entonces hoy me dicen hacé 10 abdominales y yo hago 30 (risas), y por ahí eso es muy característico mío y eso es lo que me va a llevar a recuperarme bien. Estoy sin ansiedad, con tranquilidad, en esta etapa me permití relajarme", Gisela sufrió mucho durante los días que estuvo en Ambato, en las primeras horas post lesión pero siempre estuvo acompañada y toma este momento con tranquilidad, como un desafío. Con mucha grandeza.
Ante esto, agregó: "Hay compromisos muy importantes en el 2015 y la verdad que todo lo que tengo de mal ahora, lo quiero convertir en positivo y en fortaleza porque sé que lo que viene es muy importante y no podemos fallar, entonces es como que a toda esta etapa la uso para encontrarme conmigo misma, para saber lo que quiero y sabiendo que tenemos desafíos importantísimos y que podemos hacer historia porque ir a un Juego Olímpico es el sueño de todo deportista aspira. Por mi parte comprometiéndome en cada entrenamiento, con abdonimales, fortalecimiento, bicicleta, pensando en eso que se viene en el 2015, tengo las metas muy en clara y es a eso a lo que aspiro entonces no quiero que se me escape, lo tomo como una responsabilidad mía. Me entreno muchísimo para eso y lo espero con mucha alegría más que ansiedad. Además reflexionó, ojalá que a partir de este caso, que justo me tocó a mí de lesionarme, sirva para que no estemos tan desprotegidas".
Gisela se tomó los últimos minutos de la nota para agradecer a toda la gente que estuvo presente desde el momento de la lesión, hasta hoy. "Antes de empezar, quiero pedir perdón por si me olvido de algunos, pero realmente es mucha la gente que se hizo presente en este momento.
Quiero agradecer a los doctores y kinesiólogos, a Gonzalo Gómez que es el Doctor que me operó, a Paula Barreto que cada día lucha con mi pierna. A Hernán Trotta y Fabián Spinelli que desde el momento de la lesión me contuvieron increíblemente. A Quique y Goyo que me tratan a cualquier hora cuando estoy en Concepción del Uruguay. También me gustaría agradecer a Federico Susbielles por la preocupación y el apoyo en todo desde el momento que me pasó la lesión hasta ahora, atendiéndome el teléfono siempre. Aguantando mis inquietudes y siempre dándome una mano para que no me faltara nada, porque en todos los años que llevo integrando la Selección, jamás sentí algo igual. Esperando que todo esto marque un antes y un después para nosotras.
También quiero agradecer a Cristian Santander, Hernán Amaya y Juan Cruz Pazzano que me contuvieron en Ecuador, justo en pleno torneo. Igual que Sebastián Silva, que pese a la distancia estuvo presente. A la familia Pires que me adoptaron en su casa en Buenos Aires para poder facilitarme la rehabilitación.
A mi marido, a mis padres y mis hermanos que entre tanto llanto y llanto hacían de payaso para que vuelva a sonreír. A mis amigas y amigas que coseché de los equipos que integré, a los entrenadores y mi representante. También a los múltiples llamados telefónicos dándome fuerzas".
Gisela Vega sufrió una dura lesión, se perdió de jugar la final del Sudamericano y de disfrutar un importante contrato en Europa en el más alto nivel, pero nadie tiene dudas de que luego de este tiempo de descanso y de disfrutar de su familia como hace mucho no tenía, tal como afirma ella, volverá en un gran nivel. Quizás mejor que antes, como ella confía y como todos esperamos que fuera. Cabeza y fortaleza mental, le sobran, al igual que las ganas y el entusiasmo. Ojalá el tiempo le dé la razón.