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En charla con Fabricio Oberto para DTMB, compañero de la Generación Dorada y en los Spurs, Manu Ginóbili se abrió y contó su nueva vida lejos de las canchas. Como destacó más de una vez, extraña muy pocas cosas de jugar en la NBA y hasta recordó algunas historias inéditas. Repasamos algunas de las declaraciones más interesantes (acá podés ver los 30 minutos de charla completos).

. Sobre su nueva etapa: "Llegué a un tope y estoy en etapa de stress-free. Estoy en etapa de desaturación del básquet. Me canso de solo pensar en la rutina de temporada. Eventualmente volveré a jugar con mis amigos, pero hoy estoy en una etapa de desaturación".

. Sobre la fortuna que también juega en la vida de un profesional: "Hay que tener suerte de nacer en el lugar indicado. Si nacía en Gondwana, no sé, no creo que hubiera jugado... Nací en Bahía Blanca, con padres a los que les gustaba el básquet, con hermanos que jugaron. La suerte está menospreciada y no la podes llamar, pero hay que tenerla muy en cuenta".

. Una vieja e inédita anécdota sobre su luna de miel previa a Atenas 2004: "No me maté de pedo. Se me vino un auto de frente que pasaba a un camión en una curva. Me tiré a la banquina y empecé a derrapar. Podría haber matado a alguien, podría haberme estampado contra un árbol, me podía caer en un precipicio o darme de frente con él. Ahí no había un Juego Olímpico, no había más carrera. Era una moneda al aire".

. Las chances de volver a una actividad profesional ligada al básquet: "Trabajé mucho para alcanzar esto y ahora estoy disfrutando de esos 20 años de trabajo. No sé si en algún momento se acabará la magia de este descanso y tendré algún desafío importante".

. Sobre su rutina: "No tengo planes de cambiar nada en mi rutina. Me gusta, a los chicos les gusta. Por ahora estoy disfrutando el verano argentino y el verano de acá".