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Hispano jugó este sábado uno de los mejores partidos de su temporada, goleando a Quimsa y tomando un nuevo respiro en la lucha por la salvación. Los dirigidos por Adrián Capelli atraviesan un gran momento y siguen alejándose del fondo, a tan solo 11 fechas del final. Clave para ese presente viene siendo la tarea de Mariano Fierro, uno de los jugadores que se sumó durante el transcurso de la campaña y que ayudaron a cambiar el rumbo. Tras la victoria ante los santiagueños, hablamos con el ala pivote.

- Me parece que fue de los mejores partidos que han tenido en el año.

. Sí, la verdad que contento porque era un partido clave para nosotros, contra un rival como Quimsa que tiene un goleo alto y haberlo dejado en 69 puntos es importantísimo. Además es el cuarto triunfo seguido en casa, contra cuatro rivales durísimos. Es importante para el grupo. Sabemos que si no defendemos se nos hace difícil y dejamos en pocos puntos a Quimsa, como también lo habíamos hecho con San Lorenzo. Es clave para nosotros para poder aspirar a seguir creciendo.

- ¿Qué encontraron en estas últimas semanas para explicar este presente tan positivo?

. Primero que pudimos trabajar. Antes jugábamos cada dos días. Ahora llevamos 20 días seguidos en Gallegos y tuvimos la suerte de tener partidos cada 6 o 7 días. Eso nos ayuda a trabajar, a conocernos, porque hubo muchos cambios. Vino Adrián y vio que nosotros no estábamos defendiendo. El sabía que si queríamos ganar teníamos que hacer hincapié en eso. Logramos mejorar ese tema defensivo, dejando a los rivales en menos de 75 puntos. Antes no hacían todos 90 o 95 puntos. Ese fue el gran logro que hemos tenido. Es lo que teníamos que hacer para poder ganar.

- A ustedes está claro que les terminó saliendo bien, ¿pero se complicó el hecho de estar reinventándose tanto durante el año? Porque cada jugador que llega, es un proceso de adaptación.

. La verdad que la suerte que tenemos es que el grupo está muy bien. No estábamos en una situación buena, pero el grupo estaba muy bien. Vinieron Nico y Ale que se acoplaron muy bien al grupo. Ya había jugadores que habían jugado con ellos. Conocen el momento, ya jugaron en otros años este tipo de situaciones como en la que estamos nosotros. También tuvimos 15 o 20 días para entrenar y conocernos todos. Eso hace que el grupo siga creciendo. También tuvimos la suerte de ganar, que hace todo más fácil. Estamos bien, pero falta muchísimo. Faltan 11 finales, de los cuales tenemos 7 de visitante contra rivales muy duros. Ahora viajamos a Santiago donde tienen una localía muy dura.

- Seguramente en la previa no se lo imaginaba como un partido clave, pero ¿coincidís que aquel triunfo agónico sobre Echagüe puede haber terminado de marcar un punto de inflexión en la temporada de ustedes?

. Yo creo que fue un partido aún más importante que los que siguieron. Porque fue un juego que se nos dio a nosotros en el cierre, que es algo que no nos venía pasando. Nosotros veníamos levantando, habíamos jugado muy bien el partido anterior contra Quilmes. Queríamos ganar porque no habíamos ganado casi nunca dos juegos seguidos y fue un envión anímico muy alto. Ganarlo sobre la chicharra, ganarlo como lo ganamos, la verdad que nos hizo crecer bastante.

- ¿Sentís que si rescatan un partido de esta gira por Santiago, van a tener buena parte de la salvación asegurada?

. No, sabemos que faltan 11 finales. Parece que falta poco, pero a la vez falta muchísimo. Ahora jugamos contra Olímpico y Quimsa, equipos que precisan ganar y que vienen jugando en un alto nivel, además de que se hacen muy fuertes de local. Hoy sabíamos cómo teníamos que jugarle a Quimsa para tener chances, pero en su casa ellos van a ser diferentes. Y Olímpico sabemos que perdió solo dos partidos de local en todo el año.

- ¿Qué balance empezás a hacer de lo que fue tu año? No fue fácil, porque pasó su tiempo hasta que fichaste en Hispano, pero la verdad que estás teniendo una muy buena temporada y a la vez, has sido importante para el resurgimiento del equipo. Se empezó con ansiedad y ganas de volver, pero imagino que la estás cerrando con una sonrisa.

. Sinceramente estoy muy contento, porque era un desafío grande después de estar mucho tiempo afuera. Estoy contento con el club y con el grupo. La verdad que he levantado mucho mi nivel de juego. Ayuda que el equipo también haya levantado el nivel. Si el equipo juega bien, a uno se le hace más fácil. Mi trabajo siempre pasa por la entrega, pero la verdad que estoy creciendo como está creciendo el equipo.