En un juego desvirtuado, San Lorenzo venció a Peñarol
02:39 17/12/2015 | En un partido donde el básquet quedó de lado por un incidente que dejó a Peñarol sin DT y con cuatro jugadores, San Lorenzo ganó 100-75.
San Lorenzo (CABA) 100 - Peñarol (Mar Del Plata) 75
El juego tuvo un comienzo lento, con ambos equipos bastante imprecisos. El primero en romper esa tendencia fue Peñarol, con un Leo Gutiérrez encendido: par de triples, más tres tiros libres y un doble, para anotar 11 de los primeros 13 de su equipo y darle a la visita ventaja de 7.
Sin embargo, de a poco San Lorenzo fue volviendo al partido. Una vez que Leo enfrió su mano, Peñarol se quedó sin gol y comenzó a abusar del 1 vs 1. En el otro costado, bombas de Marcos Mata y Eric Flor recortaron la diferencia, como así también un par de apariciones interesantes de Josh Powell en el poste bajo.
Los de Hernández no tenían un buen juego colectivo, pero con el talento de algunos de sus perimetrales, sobre todo Anthony Young, pudieron responder y mantener la ventaja al final del primer período: 19-16.
Lo que iba a ser un segundo cuarto que quedará grabado en la memoria de todos durante un buen tiempo, arrancó con Peñarol seco y San Lorenzo dando vuelta la historia. Los de Lamas consiguieron bastantes soluciones desde el banco, con ingresos positivos de Fernando Martina y Roquez Johnson, más una rachita de Bernardo Musso (titular por Herrmann).
Luego, fue el torneo de una ráfaga de Silas, que hasta ese momento venía complicado en el juego. Allí, de todas formas, el partido empezó a desvirtuarse: antideportiva a Gutiérrez por un rodillazo a Johnson y un par de posesiones más tarde, la jugada que generó el descontrol.
Johnson y Gutiérrez, que venían con un duelo aparte hace rato, estaban luchando por un rebote. El ala pivote argentino reclamó un codazo del foráneo y en una mala reacción, lo golpeó por atrás, ganándose la expulsión por su segunda antideportiva. Pero la cosa no quedó ahí.
Johnson se levantó y con un descalificador golpe a la cara mandó al piso a Gutiérrez. Esto enfureció por completo a Sergio Hernández, quien ingresó al campo desencajado, en búsqueda del jugador de San Lorenzo. Lo tuvieron que contener entre varios, pero el problema es que muchos de ellos fueron los suplentes de su equipo.
Debido al artículo de reyerta, los jugadores que están en el banco no pueden ingresar al campo en este tipo de situaciones y todos los de Peñarol (más el Penka Aguirre en San Lorenzo), lo hicieron. Por ende, se ganaron la expulsión automática, lo cual acompañado por la doble antideportiva a Gutiérrez, dejó a los marplatenses con cuatro hombres para el resto del partido (Figueroa, Massarelli, Brussino y Acuña). En el Ciclón se fueron Johnson y Aguirre.
Ya con el partido completamente desvirtuado, el cierre del segundo cuarto vio a San Lorenzo mantener la ventaja para llegar al entretiempo al frente por 43 a 36. Pero claro, a esa altura, el marcador y el básquet lamentablemente ya era lo de menos.
San Lorenzo llevó la ventaja a 10 temprano en el tercero con bombas de Musso y Silas y daba toda la sensación de que no sufriría por el resto de la noche. Sin embargo, un tremendo Massarelli (26 en la segunda mitad) empezó a recortar la brecha y para sorpresa de todos, la visita empató el marcador en 51 con un volcadón de Acuña.
Igualmente, a partir de ahí, la lógica dominó las acciones. San Lorenzo se calmó, empezó a mover la pelota para aprovechar el hombre de más y quebró la resistencia visitante, con varios triples y contraataques. Al finalizar el tercer cuarto, el resultado favorecía a los de Lamas por 71 a 59.
En los últimos 10 minutos ya no hubo mucho por analizar. El 5 contra 4 quedó más evidente que nunca y San Lorenzo se terminó llevando el triunfo por 100 a 75, en un juego que será mucho más recordado por lo sucedido en el segundo parcial, que por su final.