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Todo empezó con un descubrimiento de Simón Bassa, un amigo de Juan Gutiérrez en sus épocas en el colegio de Obras. ¿El hallazgo? Una camiseta histórica del exjugador que estaba a la venta en Mercado Libre. Competitivo de alma, el actual representante se dignó a comprarla, luego de darse cuenta que no tenía ninguna de esa temporada, que es de la 2011/12, en la que los del Templo del Rock perdieron en la final de la Liga Nacional ante Peñarol por 4-2. 

El precio inicial era de 3.200 pesos, pero Pipa quería un desafío. "Me pareció divertido conseguirla a un 20% menos por haber sido dueño de la camiseta”, le comentó a Básquet Plus. Por otro lado, la conversación con el vendedor inició con un cordial: "Hola, ¿qué descuento me harías por dueño original? La quiero”.  

Primero el vendedor no entendió la pregunta. Quizás no le creía, tal vez nunca pensó que podría ser el mismísimo Gutiérrez. Finalmente cedió y le dijo: "Bueno, comprámela, no hay problema”. Pipa intentó buscar su ansiado descuento del 20%, pero el poseedor de la camiseta se la dejó en 2.500 pesos.  

El relato, en este punto, se volvió inverosímil. El exjugador publicó la cómica negociación en Twitter y un usuario, sin dudar, se la regaló tras comprarla él mismo. Un simple "avísame a donde te la mando cuando me llegue. Es tuya Pipa. Regalo de Twitter” fue todo lo que esbozó @bernardobales.  

“Al final así fue el desenlace. A veces me gusta comentar cosas en Twitter y esto se me fue de las manos. Pensé que iba a quedar en una pavada de un viernes a la mañana y de repente se agrandó y terminó saliendo hasta en el diario Clarín. Era algo que no me lo esperaba”, confesó Gutiérrez.  

Alma noble, Pipa comentó que hará algo para mantener contentos tanto a quién se la obsequió como al que se la quiso vender en un primer momento: “Trataré de conseguirle alguna otra célebre camiseta al pibe que la compró y, con respecto al que las vende, me enteré que se dedica a eso, a comprar grandes grupos de camisetas, aunque no estoy seguro, y también merece su dinero, por lo que voy a tratar de conseguirle otras para que las pueda ofrecer”.  

Final feliz, como si fuera un cuento. Ideal para una película, de esas que se enmarcan en el género de ciencia ficción. Netflix de productor, Pipa de director. ¿Se animará a ser actor? Por el momento solo disfruta, se ríe y dice: “Me divierte muchísimo todo lo que pasó”.