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Entre el 19 y el 27 de febrero se llevará adelante la Segunda Ventana de FIBA alrededor del mundo y, tal como sucedió en la primera, varias selecciones han entregado sus listas de buena fe con los jugadores de Euroliga incluidos. Ante esta situación y para evitar cualquier tipo de especulación, el presidente de la Euroliga Jordi Bartomeu fue contundente en relación a la postura del torneo de clubes: "Hemos de ser realistas. Tendremos diálogo con la FIBA. Espero que muy pronto porque ya estamos trabajando en este sentido, pero no creo que lleguemos a un acuerdo esta temporada. Los calendarios son los que son y nosotros, ya lo dijimos en octubre, no podemos hacer cambios de calendario durante la temporada debido a la complejidad de la Euroliga".

Cuando se le consultó en esta entrevista con el Diario AS sobre si era imposible llegar a un acuerdo en el corto plaza, la respuesta de Bartomeu fue afirmativa. "No tenemos disponibilidad de pabellones pero, más allá de todo, es una cuestión de concepto. No pienso que la Euroliga haya ganado ninguna batalla, pero creo que se ha puesto de manifiesto que cuando hay competiciones profesionales, como la NBA en Estados Unidos y aquí la Euroliga, lógicamente hay unas necesidades y unos condicionantes que hacen muy difícil que estas puedan ser compatibles con los programas de Selecciones nacionales cuando estos interfieren", profundizó.

Aunque expresó que la discrepancia entre Euroliga y FIBA es total con respecto a este tema, dejó la puerta abierta a la posibilidad de un acuerdo: "Interfieren en absolutamente en todo, y cuando eso pasa no hay posibilidad de compatibilidad. Tampoco creo que sea un gran drama pero es lo que hay y nosotros ya hemos dicho muchas veces lo que opinamos sobre un proyecto en el cual las Selecciones nacionales no juegan con sus mejores jugadores. No es cuestión de si se puede arreglar en febrero porque es un problema de concepto. Cuando esto se reconsidere será más fácil esa compatibilidad, y nos gustaría mucho que fuese así".