Argentina cerró su participación en la fase de grupos del Mundial de China con una victoria ante Polonia por 91-65. El equipo dirigido por Sergio Hernández no solo mantuvo su invicto (5-0), también ganó los dos grupos que jugó en Wuhan y Foshan, y ahora espera conocer cual será el rival que le tocará enfrentar en cuartos de final, y que saldrá del enfrentamiento entre Serbia y España.
Argentina sorprendió de entrada moviendo mucho el balón, evitando el tiro abierto y eligiendo a Delía (10) como primera opción en el ataque estacionado. Y el pivote respondió fabricando espacios y ganando contínuamente (5/7 en dobles), hasta que le doblaron la marca para evitar que siga dañando en el poste bajo polaco. Y en defensa la consiga fue asegurar el rebote en el propio tablero con bloqueos permanentes. ¿El resultado? Polonia no tuvo segundas opciones porque no capturó ningún rebote ofensivo en los primeros diez minutos. Cuando los de Hernández pudieron explotar la contra, en virtud de su intensidad defensiva, establecieron la primera ventaja: 20-14.
Un triple y un doble de Brussino después de recuperar un balón en la primera línea aumentaron la ventaja en menos de un minuto del segundo cuarto (25-14). Argentina con la rotación elegida por Hernández planteó un juego más lento pero manteniendo siempre la fortaleza defensiva (8 recuperos) y forzando permantenemente a Polonia al error (13 pérdidas). Sin embargo, la diferencia recién la pudo ampliar cuando Laprovittola y Vildoza pudieron romper con la racha negativa en el perímetro (3/12 en el primer tiempo), y Deck (7) finalmente logró desequilibrar ante la talla superior de sus defensores: 42-27.
Polonia salió con otra energía al regreso de vestuarios, metió mucha presión sobre el balón, sacó rédito a las impresiciones de su adversario, y con el liderazgo de Slaughter (7) llegó a reducir la diferencia a nueve (46-37) en cuatro minutos. Fue como un golpe de efecto, sin necesidad de un tiempo muerto Argentina reaccionó dentro de la cancha, o mejor dicho volvió a imponer su defensa insoportable, maniató a Polonia, lo llevó nuevamente a cometer errores con la pelota: 5 pérdidas y solo 4 puntos en 6 minutos. Y en ataque lo lastimó con el juego en transición sumado al desequilibrio de Scola (21) en la pintura: 70-41.
En el último cuarto Argentina se dedicó a administrar la diferencia pero sin aflojar la intensidad atrás. El ataque fluyó a partir del gran trabajo defensivo, el cual se transformó en su ADN. El final encontró a un equipo sólido, aún en la rotación que dispuso Hernández para cuidar energías de cara al cruce de cuartos.
En un equipo de gran rendimiento colectivo se destacaron Luis Scola, Marcos Delía, Facundo Campazzo (7 puntos y 6 asistencias), Gabriel Deck (9 tantos), Patricio Garino (9 tantos y 3 tableros) y Nicolás Brussino (10 unidades). El capitán fue el goleador del encuentro con 21 tantos, seguido de los 12 de Delía.
Roberto Martín (Enviado especial a Foshan, China)
En Twitter: @basquetplus
En Twitter: @robertofmartin