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La jugada final durante el tiempo reglamentario del Juego 5 de la serie entre Miami Heat y Milwaukee Bucks fue una de las más emocionantes en la historia de los playoffs de la NBA. Jimmy Butler anotó una canasta impresionante con un pase alto para enviar el juego a la prórroga. En una entrevista posterior al juego, el entrenador en jefe Erik Spoelstra reveló que fue idea de Butler ejecutar la jugada final y que ambos habían practicado variaciones de ella con diferentes jugadores.

Inicialmente, Spoelstra tuvo la idea de engañar al entrenador en jefe de los Bucks, Mike Budenholzer, al enviar a la banca a Bam Adebayo. Budenholzer respondió enviando a la banca a Brook López, pensando que no se enviaría ningún pase alto hacia el aro. Sin embargo, Butler convenció a Spoelstra de que él sería el jugador adecuado para ejecutar la jugada, asegurándole que podría recibir el pase alto y anotar. "Dejame ser ese chico" fue el pedido de Jimmy.

En la jugada final, Butler se deslizó detrás de la defensa de los Bucks y recibió el pase alto de su compañero de equipo, Jae Crowder. Luego, anotó una canasta espectacular con Giannis Antetokounmpo y Khris Middleton defendiéndolo ferozmente. La canasta envió a los aficionados de los Heat a un frenesí y aseguró que el juego continuara en la prórroga, el gran tiro que luego significaría la victoria.