Basquetplus.com

Cameron Thomas fue una vez más el punto destacado para los Brooklyn Nets en la derrota por 120-125 ante los Dallas Mavericks. Esta actuación fue su continuación tras su explosión de 36 puntos en la derrota inaugural de la temporada frente a los Cleveland Cavaliers y marcó una señal de que Brooklyn quizá encontró por fin a su anotador insignia que le faltaba.

En los dos primeros juegos de la temporada, Thomas promedia 33 puntos por juego, una estadística sorprendente considerando que inicialmente no se le consideraba el jugador estrella en ataque al inicio de la temporada. Inicialmente planeado como la opción principal, las dificultades actuales de Mikal Bridges han permitido a Cam asumir sin esfuerzo el protagonismo como el punto focal ofensivo del equipo, al menos por el momento.

En cada posesión, Thomas buscó agresivamente anotar, mostrando una diversa gama de tiros. Ya sea desde más allá del arco o conduciendo hacia la pintura para finalizar jugadas, ha demostrado una notable versatilidad en ese aspecto del juego. Aunque existe la posibilidad de un período de enfriamiento, el producto de LSU ha presentado su caso para un rol titular al entrenador en jefe, Jacque Vaughn.

Thomas ha estado luchando para tener un papel constante en la ofensiva de Brooklyn desde la llegada de Steve Nash. Drafteado en 2021, el escolta de LSU mostró en la Summer League como en múltiples juegos de la temporada regular a lo largo de los últimos años que sólo necesita constancia para que su juego explote.

Inexplicablemente, el joven anotador tuvo tres juegos seguidos con más de 35 puntos la temporada pasada, y luego pasó los siguientes tres partidos sin ingresar al parquet. Esto es ya un hábito en los Nets, que claramente han afectado a un jugador que cuando es titular promedia 30.5 puntos, la segunda marca más alta en la historia después de Jordan.

Los Nets han perdido por poco dos juegos que podrían haber ganado, pero el énfasis de Thomas en los aspectos positivos destaca el prometedor crecimiento del equipo, lo que podría conducir pronto a victorias. Si Brooklyn se digna finalmente a darle las riendas ofensivas, podría ser el camino hacia el estrellato para el joven.