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Con el diario del lunes es mucho más fácil opinar, pero cuando de estadísticas avanzadas se trata es contundente la forma de desnudar en números lo que paso en la cancha.

Hubiera resultado muy interesante intentar escribir este artículo previo al cruce, pero no hubiera resultado conveniente exponer datos a favor o en contra de ambos planteles, toda vez que estaba en juego poder continuar dentro de la competencia.

Ese cruce de cuartos fue un ejemplo claro de un equipo que intentó seguir al pie de la letra su forma de jugar y mantener el crecimiento que venía manifestando desde ya hace buena parte de la etapa de clasificación. 

Nos referimos a Comunicaciones, que a pesar de las ausencias dignifico su temporada con dos partidos de playoffs en números muy parejos a su rendimiento en la temporada, pero que no le alcanzó para superar a un rival como Quimsa que superó en todos los rubros de eficiencia su rendimiento en comparación con la etapa que precedió la instancia de la postemporada.

La eterna lucha que refleja quien impone el ritmo de juego no fue el factor protagonista en esta oportunidad. Tanto Quimsa como Comunicaciones arrastraban ritmos muy parecidos (76,1 y 76,7 respectivamente), por lo cual, no se anticipaba lucha estratégica en tal sentido.

Esto hacia posible prever que la eficiencia y la productividad serían los aspectos más determinantes a inclinar la balanza del rendimiento. El índice de eficiencia ofensiva (OER) destaca como parámetro fundamental para ejemplificar lo comentado anteriormente.

Comunicaciones, que traía un 0,89 de eficiencia ofensiva en la etapa anterior, pudo mantener ese rendimiento reflejado en el 0,88 con el que jugó estos dos partidos ante Quimsa.

Por su parte, Quimsa, como para no perder la costumbre de jugar este tipo de instancias, elevó su eficiencia ofensiva de 0,96 en la etapa de clasificación a 1 PPP (puntos por posesión) frente a Comu en estos dos partidos.

Para seguir la línea de la productividad en lo que respecta a la efectividad de los tiros resulta extremadamente significativo los valores que ofrecen el porcentaje de tiro efectivo (eFG %) y el tiro verdadero (TS) sobre todo en los números de Quimsa.

El eFG % que ajusta los goles de campo dándole el valor extra (un punto más) a los triples, destacando la importancia que merecen los lanzamientos más alejados del cesto, nos demuestra como Quimsa, de un 53% en la clasificatoria, que ya se considera interesante, elevó su Eaiciencia a un 60%.

En el rubro TS, que toma en cuenta los dobles, triples y tiros libres, para dar una idea de cómo tira el jugador globalmente y que tiene como objetivo calcular con mayor precisión el tiro más que el porcentaje de efectividad en sí, exhibe un crecimiento a favor Quimsa, de 56 a 61% de una etapa a la otra.

Otros parámetros de juego que dependen de las plays (jugadas) como son los casos de los porcentajes de pérdidas, recuperos y asistencias reflejan muy pocos cambios de significación en este playoff. 

Dicho en otras palabras, no serían ninguno de esos rubros anteriormente mencionados los responsables máximos de los resultados obtenidos ni para Quimsa ni para Comunicaciones. En la misma medida se presenta el análisis de los rebotes según los números que nos muestran las estadísticas avanzadas.

Por un lado, Quimsa mostró una pequeña disminución en porcentajes de rebotes ofensivos y defensivos. Por otro lado, Comunicaciones reflejó un pequeño crecimiento en cuanto a los Rebotes se refiere, evidentemente, no le bastó para aspirar al triunfo.

Por último, los tiros libres, aspecto de juego, siempre tan polémico, al que casi siempre culpamos como máximo responsable de ganar y perder, en esta oportunidad dio valores favorables a Comunicaciones no solo en los porcentajes de efectividad, 68,5% de Quimsa y 73,5% de los mercedeños, sino además lo que nos muestra el ratio de tiro libre que refleja la asiduidad de un jugador y un equipo a la línea de los suspiros.

Comunicaciones se ganó el derecho de ir a la línea de tiros libres. Siempre es importante reconocer, que se convierte en una virtud en el básquet moderno y con los sucesivos cambios de reglamento, poder obtener faltas y definir desde la línea de tiro libre.

No obstante, este parámetro de juego tampoco ayudó a que Comunicaciones le complicara la vida a su rival de turno. En fin, las estadísticas avanzadas, en muchas oportunidades, te muestran cosas que los ojos no ven a simple vista.

Como el nivel de análisis en la actualidad se torna cada vez más en crecimiento, resulta interesante, y de hecho muy útil, saber diferenciar aspectos del Juego que pueden llevarnos a tener una idea más ajustada a la realidad sobre lo que sucede en una cancha.

En esta oportunidad, Quimsa demostró en la cancha una superioridad tal, que lo guio a ganar por calidad, según muestran algunos de los ejemplos analizados anteriormente. 

Por Raúl Aguilar Nodarse, director provincial ENEBA de Formosa