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El dominio de LeBron James en esta década es abrumador: a partir de la 2010-2011, el campeón del Este siempre ha tenido al alero como protagonista principal de su plantel. Miami en cuatro ocasiones y Cleveland en las últimas dos.

James ganó este viernes su sexta final consecutiva del Este, al superar a Toronto por 4 a 2. De esta forma, tendrá un nuevo viaje a las finales, persiguiendo el tercer anillo de su carrera (por ahora tiene marca de 2-4 en las definiciones).

En los últimos diez años, contando desde su llegada al Heat, James ganó 126 partidos de playoffs. La cifra supera al de cualquier otra franquicia, incluyendo lo que ganaron con el propio James: Miami consiguió 86 victorias, Cleveland 66 y Boston 58.

De hecho, James (y técnicamente, James Jones también) será el octavo jugador en la historia de la NBA en llegar a seis finales de forma consecutiva y el primero en hacerlo fuera de la era de absoluto dominio de los Celtics de Bill Russell. El pivote, junto a Sam Jones, Bob Cousy, KC Jones, Satch Sanders, Tom Heinsohn y Frank Ramsey son los otros que lo lograron.

Las víctimas de James en las finales de Conferencia fueron: Chicago (4-1, 2011), Boston (4-3, 2012), Indiana (4-3, 2013), Indiana (4-2, 2014), Atlanta (4-0, 2015) y Toronto (4-2, 2016).

El análisis es simple: LeBron es de hace años el Rey del Este y por ahora, no aparecen pretendientes serios al trono, con chances de derrocarlo.