NBA

George Karl, una historia de superación constante

08:33 03/10/2022 | El entrenador ingresó al Hall of Fame en 2022. Superó al cáncer en tres ocasiones, tiene más de 1000 victorias en la NBA y tuvo un fugaz paso por el Real Madrid.

George Karl, una historia de superación constante

George Matthew Karl nació en mayo de 1951 en Penn Hills, Pensilvania y su vida, desde muy chico, estuvo ligada al básquet. Estudió en la histórica Universidad de Carolina del Norte y tras finalizar su etapa como jugador en la NCAA, New York Knicks lo eligió en la posición 14 de la cuarta ronda del draft de 1973.

Pero, como no tenía garantías de jugar en la NBA por ser elegido en la cuarta ronda, Karl aceptó una oferta de San Antonio Spurs y se marchó a Texas. Estuvo cinco temporadas en la franquicia, las primeras tres en la ABA y las dos últimas en la NBA, como base suplente del equipo. Entre ambas competencias totalizó poco más de 250 partidos con 6.5 puntos y 3.0 asistencias.

Su escasa participación lo llevaron a tomar la decisión de dejar de jugar y convertirse en entrenador, con apenas 27 años. Comenzó a trabajar en Montana Golden Nuggets de la Continental Basketball Association (CBA). Allí tuvo un exitoso paso: en tres años que estuvo, ganó dos veces el premio al entrenador del año.

Recién en 1984 da su gran salto a la NBA: Cleveland Cavaliers lo contrata para ser el entrenador principal del equipo. Tras dos temporadas es despedido y lo ficha Golden State Warriors. En la franquicia de San Francisco tuvo un flojo desempeño por lo que fue destituido de sus funciones tras la segunda temporada.

Luego de volver a dirigir en la CBA y ganar, nuevamente el título al entrenador del año, Karl armó las valijas y cruzó el océano. Su nuevo destino era en Europa: acepto una oferta del Real Madrid español para convertirse en su entrenador, en la 1989/90. Las cosas no van bien, es despedido, vuelve a la CBA, gana el título al entrenador del año y redobla la apuesta: regresa a España para tener revancha.

Las cosas no suceden como lo esperaba y vuelve a ser despedido antes que finalice la temporada 1991/92. A diferencia de su experiencia anterior, cuando regresa a Estados Unidos lo hace en grande y ficha con Seattle Supersonics para convertirse en entrenador del equipo en la NBA.

Se mantuvo en el cargo durante siete temporadas, fue uno de los puntos más altos de su carrera. El mayor hito lo consiguió en la 95/96 cuando llegaron a la final de la NBA y enfrentaron a Chicago Bulls, el poderoso equipo de Michael Jordan, Scottie Pippen, Dennis Rodman y compañía. Fue una recordada serie que terminaron ganando los de Phil Jackson por 4-2.

En 1998 decide cambiar de aire y se marcha hacia Milwaukee Bucks. Estuvo al frente del equipo hasta el 2003 y tras estar dos años sin dirigir, en 2005 regresa a la NBA y firma con Denver Nuggets. Fue su estadía más larga, se mantuvo hasta 2013. En el medio, le tocó vivir muchas cosas importantes.

Tuvo que enfrentar dos partidos complicados: en 2005 se le diagnosticó de próstata y en 2007 de garganta. A los dos los pudo superar, los sorteó con éxito. En la temporada 2012/13 es galardonado con el premio al entrenador del año, pero los Nuggets pierden en primera ronda de los playoffs ante Golden State Warriors y George es destituido de su cargo.

Tras dos años sin dirigir, volvió a la NBA de la mano de Sacramento Kings, franquicia con la que firmó un contrato por cuatro temporadas pero que no pudo finalizar. Nuevamente y por tercera vez el cáncer se presentó en su vida para ponerlo a prueba. La garganta fue otra vez el foco de la enfermedad.

Pero George fue fuerte y pudo vencerlo nuevamente, por tercera vez, pero ya no volvió a dirigir. Se retiró con más de con más de 2100 partidos dirigidos en la NBA entre temporada regular y playoffs. Pero, no solo eso, se dio el lujo de ser uno de los nueve entrenadores en la historia de la mejor liga del mundo de haber conseguido ganar más de 1000 partidos.

Merecidamente, fue inducido al Hall of Fame de la NBA en 2022 junto al argentino Manu Ginóbili, entre otros.

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