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Real Madrid 84 - Barcelona Lassa 91

Volvió Nocioni, pero el Real perdió el clásico ante Barcelona / Básquet Plus

El derbi español quedó en manos de un Barcelona fantástico. Con un tercer parcial sublime y decisivo, el elenco azulgrana jugó un partido de altísimo nivel en ambos costados y venció al Real Madrid por 91-84, cerrando el 2015 de la mejor manera y quedando como único escolta del puntero Valencia. Los catalanes cortaron una racha de seis años sin poder ganar en su visita al Palacio de los Deportes del Madrid durante fases regulares.

El equipo de Xavi Pascual tuvo varios puntos altos, desde lo generado por un constante Tomas Satoransky (16 puntos, 7 rebotes y 6 asistencias), pasando por Justin Doellman (17 puntos y 5 rebotes), Pau Ribas (15 tantos), Juan Carlos Navarro (12 unidades y 5 asistencias) y Samardo Samuels (13 puntos). Todos aparecieron en distintos momentos claves, ya sea para sostener el gran rendimiento del equipo como así también para potenciar la exquisita calidad que posee este grupo.

El Real fue más intermitente. Exceptuando el durísimo tercer parcial donde Barcelona lo pasó por arriba, el conjunto madrileño halló rendimientos aceptables de Jaycee Carroll, Sergio Rodríguez, Gustavo Ayón y Sergio Llull. De todas formas, esos papeles quedaron eclipsados por lo plasmado en la vereda opositora.

Barcelona arrancó mejor, más ordenado desde el fondo y con una defensa que le pasó factura a un Real Madrid falto de ritmo. Los de la capital española tardaron en ponerse en juego, porque más allá de la buena contención rival el equipo de Laso también careció de efectividad. Así, a pesar de mantenerse al acecho, le costó.

El elenco de Pascual desequilibró con Satoransky y Tomic, superiores en el duelo frente a Chacho y Ayón, se adelantó 10-6 pero el Real emparejó un poco el trámite cuando ajustó la marca en el juego interior. Lo de Doellman, incisivo y con muchos puntos, fue de lo mejorcito de los catalanes en ambos costados.

Barcelona llegó a adelantarse 17-9, estirando su gran inicio y siendo muy superior en el rebote (sobre todo el defensivo, donde no dejó que el local tome segundas chances). Pero tras esa carrera, Laso pidió un tiempo muerto y reorganizó a un Madrid que mejoró su pobre registro de 3/12 en tiros de campos hasta ese momento.

El Real salió mucho más enchufado, no solo desde la efectividad sino también desde el juego. El pase extra fue decisivo para poder castigar a pie firme y libre, plasmando una racha de cuatro triples consecutivos de la mano de Maciulis (2) y Carroll (2).

En un abrir y cerrar de ojos el dueño de casa volvió al partido, se lució con el juego que más cómodo le queda (pasándose la bola y dañando con los triples) e incluso pasó al frente por 23-22, aunque en la agonía del parcial Ribas contestó por la misma vía y la ventaja inicial quedó en manos catalanas: 25-23.

Samuels se adueñó de una buena parte del segundo periodo, desde el comienzo del mismo y con una racha de puntos que volvió a darle un colchón de seis unidades (31-25). Pero la intensidad no aflojó y el Real volvió a la carga con un triple de Carroll y una buena acción de Ayón.

El problema para los capitalinos fue Samuels, que con el correr de los minutos se siguió enchufando y permitió que el Barcelona no cediera su ventaja. El daño en el pick central también fue un dolor de cabeza para el Madrid, porque fuese con Ribas o con Satoranski no logró frenar las llegadas al aro de los catalanes y la brecha de distancia volvió a ser de seis (43-37).

De todas formas el Real tuvo cosas muy buenas que le permitieron mantenerse al acecho como la combinación de Chacho y Ayón o la productividad de Thompkins. Restando poco menos de tres minutos, se produjo el esperado regreso a las canchas de Chapu Nocioni (cuatro partidos ACB de ausencia por un esguince en el hombro), que la primera bola que tuvo la transformó en un triple.

El Madrid se fue arrimando pero nunca terminó de sentirse cómodo porque el termómetro del partido lo llevó Barcelona, mucho más si tenemos en cuenta que sobre la chicharra apareció Navarro para clavar un hiriente triple. La bomba del histórico jugador estiró diferencias y los catalanes se fueron al descanso largo 50-44 arriba.

El tercer parcial fue decisivo porque el Real le empezó a perderle el hilo al Barcelona. Lo de los locales decayó, porque Llull no funcionó y perdió en el duelo mano a mano, sin poder distribuir bien el juego y sin poder dañar en el aro. La producción de la Casa Blanca decayó considerablemente y la visita lo aprovechó con creces.

La defensa de los azulgranas fue impecable y en un par de minutos la brecha pasó a ser de nueve unidades (59-50). En ataque volvieron a predominar las acciones de Satoransky y Doellman, terminando de provocar un mazazo en las aspiraciones del Madrid y sacando una máxima de dieciocho (74-56) a poco del cierre.

Los capitalinos se apagaron, no tuvieron respuestas y tampoco hubo síntomas de reacción en un equipo que perdió el parcial por 24 a 14. De hecho, los 14 tantos anotados durante el tercer periodo fue una señal alarmante para un equipo que promedia casi 92 unidades por juego. Con ventaja de 74-58, el Barcelona entró al último capítulo muy cerca de concretar el zarpazo.

Un doble y falta de Ribas (de gran momento) plasmaron la máxima del partido para el Barcelona, que llegó ser de diecinueve (77-58). Con la soga al cuello, el Real presionó con un par de ofensivas y metió un poco de susto tras dos bombazos consecutivos de Taylor.

Luego de tanto empujar el Madrid se puso a solo once unidades (81-70), y a pesar de que después volvió a sumar un nuevo triple (de la mano de Maciulis) la diferencia fue difícil de disminuir ante unos catalanes más sólidos y con el reloj de aliado. Es cierto que los capitalinos se vieron obligados a dar un manotazo de ahogado para intentar volver al juego, pero la supremacía que el Barcelona reflejó en el tercer periodo fue difícil de revertir.

Los intentos del Madrid siguieron metiendo un poco más de presión, aunque el Barcelona siguió contando con una ventaja que le permitió estando lo suficientemente cómodo de cara al cierre. Los de Laso tuvieron un último arrebato en los minutos finales, llegando a ponerse a seis (90-84) pero con un Barcelona que lo terminó definiendo por 91-84.

La derrota del Madrid le corta una racha de once victorias al hilo, recordando que el club blanco no perdía en la ACB desde el 11 de octubre (ante Valencia, en el debut de temporada de la liga 2015/16). Ahora, el equipo de la capital española quedó en el tercer escalón de la tabla con récord de 11-2, mientras que el Barcelona (12-1) quedó como único escolta del líder invicto Valencia (13-0).

. Andrés Nocioni (Real Madrid): suplente, 3 puntos (1/2 en triples), 2 rebotes y 1 pérdida en 4m33s.

Lucas Leiva / [email protected]

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