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En marzo, Cleveland anunció que Tyronn Lue que se tomaría un descanso de su trabajo por un tiempo indeterminado. Más adelante, se conoció que el entrenador de los Cavaliers sufría un dolor en el pecho y hasta llegó a toser sangre, lo que le impidió terminar de dirigir a su equipo en múltiples oportunidades.

Luego de estos incidentes, Lue se tomó el descanso que necesitaba y cambió algunas cosas en su vida. "Creo que por primera vez en mi carrera de 20 años tuve una chance de enfocarme en mi mismo. No fue tan malo como parecía, pero si tuve dolores en el pecho en los últimos años. Así que me tomé dos semanas y me enfoqué totalmente en mi y cambié mi dieta, contraté un chef, paré de tomar Shirley Temples y dejé los dulces para empezar a cuidarme. Ahora me siento genial", dijo Tyronn.

Inclusive recibió la ayuda de Steve Kerr, hoy su rival en las finales de la NBA, y quién también tuvo problemas de salud recientes: "Cuando estás en esta posición, estar en la NBA, y tenes a tu familia, amigos, todos quieren hacer lo posible para cuidarte y hacerte sentir bien. Hay momentos en los que podes perder la noción de vos mismo y lo que necesitas".