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La cúpula dirigencial de la NBA no está conforme con la actitud de ciertos equipos de dejar pasar algunos partidos para poder conseguir más probabilidades de una selección alta en el draft. No se trata de dejarse perder, sino de, por ejemplo, descansar a los titulares en los juegos finales de las temporadas. Un caso emblemático es Philadelphia, modelo denominado The Process porque se ha empezado a reconstruir con primeras selecciones del Draft. Y para estar entre los primeros en elegir, tenés que perder mucho.

Adam Silver dijo lo siguiente, refiriéndose a esta situación: "Vamos a tener que reaccionar y cambiar los incentivos. Es frustrante. He estado hablando con gente del fútbol europeo y, no sugiero que lo hagamos en la NBA, pero ellos tienen el mejor incentivo posible: los equipos descienden. Pensad en las consecuencias que tiene. Pierden el dinero de las televisiones, pierden dinero de las entradas por no jugar contra los mejores equipos... Tienen el mejor incentivo imposible para no caer al fondo de la tabla. En nuestra liga se ha llegado a alabar a un equipo como los Sixers por El Proceso y les ha visto favorablemente en comparación con los Knicks, diciendo que eso es lo que debería haber hecho Phil Jackson, tener uno de los peores récords de la historia de la liga durante cuatro años y que a la franquicia le hubiera ido mejor. Y no lo sé, quizás hubiera sido mejor. Pero si ese es el caso, entonces definitivamente tenemos que cambiar las reglas".

Quizás el descenso propiamente dicho sea un poco disfuncional, teniendo en cuenta el formato de competencia y la idiosincrasia de la NBA, pero Silver dejó la puerta abierta para futuros cambios. El comisionado se ha destacado por buscar nuevas ideas en pos de mejorar aún más la calidad y la competitvidad de la Liga. Quizás esta sea una de las más importantes. Hasta ahora los resultados son positivos, ya que en la fase regular que acaba de terminar se produjo el récord de audiencia: 22 millones.