Entrevista

Karina Rodríguez: "En los próximos 4 a 6 años la selección argentina femenina dará un salto terrible"

23:26 15/06/2020 | La directora del básquet femenino de la CABB habló con Básquet Plus el pasado viernes no solo de su área, sino también de su época como jugadora, donde fue una de las mejores del mundo.

Karina Rodríguez habla y a veces le cuesta un poco el español. Tras 22 años viviendo en Brasil, el portugués pasó a ser su lengua principal y, si bien hace un tiempo que está en Buenos Aires manejando el básquet femenino de la CABB, se nota su peso en Karina. Rodríguez aceptó la charla con Básquet Plus el pasado viernes en días de conflicto por un comunicado publicado por jugadoras de la selección. Pero no hablamos solo de eso, sino también de su fabulosa carrera como jugadora.

- Más allá de ser mujer y de estar en el rubro, ¿cómo ves la sitiación del básquet femenino en general?
. El básquet femenino mundial está desarrollándose y lamentablemente en estos momentos Sudamérica es la peor región del mundo, ya que no tendrá ningún representante en los Juegos Olímpicos. Cada vez nos cuesta un poco más. La decisión de FIBA de bajar la cantidad de equipos en los Mundiales a 12 equipos, cuando el masculino tiene 32, nos complicó más. En el mundo, el básquet femenino está creciendo y hay ligas importantes como Australia, España, Italia, Bélgica...hasta Centroamérica se ha fortalecido. Obviamente este es un buen momento para los deportes femeninos por esta situación de la mujer en el mundo, de obtener su espacio. Los próximos 4/8 años serán fundamentales. La propia WNBA ha mejorado sus sueldos, los derechos de las jugadoras. África se está desarrollando muy fuerte. Espero que nosotros podamos estar acompañando este proceso desde Argentina.

-¿Brasil quedó muy relegado?
. Brasil viene de una camada tremenda con Hortencia, Paula y Janeth. Con ellas era una potencia mundial, a nivel de clubes también. De los últimos 6 mundiales de clubes que hubo, yo jugué 4 con ellas y ganamos los 4. Era una potencia a nivel de sponsors, de clubes, y eso repercutía en todo. En la selección, en la prensa. Brasil ahora está en una renovación tras la suspensión de FIBA y se está recuperando. Llegó al Preolímpico y tuvo una noche trágica contra Puerto Rico que, de ganar, lo hubiese puesto en Tokio. La pregunta la dividiría a nivel de clubes y de selecciones. Por ejemplo en Argentina yo vislumbro que en los próximos 4 a 6 años la selección argentina dará un salto terrible para arriba porque tenemos, aparte de la planificación desde CABB, 4 jugadores en el nivel I de la NCAA, tenés jugadoras en la Euroliga, otras yendo a Europa a las categorías A2 o A1. Muchas veces los buenos resultados de una selección no repercuten internamente en los clubes. Nosotros lanzaremos ahora 45 escuelas de básquet femenino por todo el país, bajo el proyecto EDA (Escuelas Deportivas Argentinas). Tenemos que dividir las cosas en masificación y el producto interno que estamos produciendo para el exterior.

-¿Qué sentido tiene lo de la baja de 12 equipos para el Mundial?
. FIBA entendió que la diferencia entre el primero y el último era muy grande cuando eran 16, y por eso bajó, pero eso complica mucho. Ahora se está trabajando para la posibilidad de volver a 16 e incluso subir a 20. 

-¿Se puede tener una buena selección sin una buena competencia interna? ¿Sostenerlo en el tiempo?
. Tenés que disfrutar de los frutos si estás plantando. Mientras empezamos con las escuelas que tendrán 2000 niñas jugando, aprovechemos a las jugadoras que están en el exteror. Un club argentino se entrena 3 veces por semana, 3 horas, con suerte. O sea, unas 9 horas semanales y 36 al mes. En la Universidad se entrenan 16 horas por semana. Casi el doble. Eso, indefectiblemente, creará un salto de calidad tremendo. Nosotros entendemos el problema que existe con la selección, pero nuestra mirada va más allá de eso, va a la base de la pirámide. Si en Argentina hoy los estudios informan que el básquet es la opción número 9 o 10 en deportes entre nenas, tenemos un problema. No es que no les guste. No hay canchas para que las nenas se entrenen. No digo cosas por decir. Si agarrás el ranking FIBA, de los países de arriba, la mayor amplitud entre la posición del femenino y la del masculino es de Argentina. Los varones están 4º y las mujeres, 27º. El único otro caso así es Bélgica, que está mejor en mujeres (7º) que en varones (37º). Pero en el resto no pasa. España, Francia, Estados Unidos, Australia, están todos dentro de los 10 puestos máximo. Eso me preocupa mucho. Obvio que no quiero que el masculino caiga, sino que el femenino suba. Pero quiero que en 2 o 3 años podamos achicar la diferencia a 10 y estar en el Top 12 o Top 15. 

- Cuando un chico empieza a los 6/8 años, necesita ver un espejo en una competencia. Los varones tienen la Liga desde hace 35 años. ¿El punto pasa porque haya una Liga femenina continua y estable, con una cantidad de equipos decente?
. Este año iba a tener 7 equipos. Yo digo que no es solo un tema económico. Si viniera un millonario árabe y pagara 20 equipos, no habría jugadoras para competir. Obviamente si hubiese más sponsors, las chicas que están en el exterior jugarían acá también. Nosotros tenemos que aspirar a una Liga de 10 equipos, con extranjeras de la zona: uruguayas, chilenas, etc. En la región en general no hay competencias locales fuertes. Es un continente que ha sufrido para desarrollarse en básquetbol.

-¿Cuál es el principal problema para la continuidad de la Liga?
. Yo estaba muy animada en diciembre pasado, cuando fui invitada a participar en la concepción de la nueva Liga. La Liga tenía un ranking y cada club no podía superar un determinado número, lo que iba a hacer que no se juntaran todas las mejores en un mismo equipo y tuvieran que ir al interior. Y, en el segundo semestre, iba a haber una Liga de Desarrollo, sin la necesidad de tener un equipo en Liga Nacional, algo que era obligatorio antes. Había más de 25 clubes interesados, porque las exigencias de la Liga no podían cumplirse en algunos casos. En cambio para la LDD se animaban. Nosotros tenemos un problema concreto con las jugadoras de 16 a 20 años, que es cuando se pierden. Para que tengas una idea, tenemos más jugadoras en Maxibásquet que en torneos de primera división. Tenemos un embudo muy grande hacia los 17 años. Tenemos que mejorar las competencias ahí para que cambiar eso. Nosotros perdemos muchas jugadoras con el cestoball, que es parecido al básquet. Eso no debería pasar. Hace 10 años, el jugador o jugadora alta iban al básquet. Hoy lo disputan casi todos los deportes. Casi todos quieren gente alta, atleta. Yo creo que el 3x3 puede ser una puerta para entrar a las chicas al básquet. Nosotros, de nuestra parte, en CABB, cerramos un contrato con el Dow Center donde en los próximos 4 años, todas las selecciones formativas, U13, U15, U17, U19, van a entrenarse allí. Entonces vas a tener una herramienta, porque van a estar en el mejor centro de entrenamiento del país. Y tendrán además los mismos cuerpos médicos y técnicos varones y mujeres. Es un paso gigantesco. Si no hubiera pandemia, ya estaría rindiendo frutos. 

-¿Tenés una idea de la cantidad de jugadoras y clubes que tienen básquet femenino?
. Nosotros empezamos a hacer un censo el 28 de febrero, que iba a terminar el 31 de julio, aunque no sé si con esto ahora se demorará. Pero te puedo decir que tenemos el triple de jugadoras que las que están federadas. En algunas provincias muchas veces no se anota a las chicas porque tiene un costo. El FIBA organizer. Y muchas veces no tenés cómo seguirlas si no están ingresadas. Hoy debemos tener 5.000/6.000 federadas, pero quizá llegues a 15.000 que lo practican. Hay datos duros igual para destacar. Tierra del Fuego es la provincia con más jugadoreas federadas per cápita. Tiene unas 500 entre todas las categorías. Es una potencia. Tendremos que trabajar en eso. Volviendo al tema, si no sabemos cuántos somos, se complica hacer una planificación.

- El otro día Borro me decía también de la idea de que el minibásquet sea mixto.
. Sí, claro. El soccer en Estados Unidos mejoró y se expandió en el femenino porque hasta los 12 años es mixto. Yo no veo ningún problema. Ayuda en el desarrollo de varones y mujeres. Crea un clima fantástico en los clubes además. España lo hace en minibásquet. 

- Una cosa así automáticamente te va a generar un aumento de practicantes mujeres. En los pueblos es muy difícil encontrar tres o cuatro clubes que jueguen femenino. 
. Claro, porque en muchos sitios no podés juntar 10 nenas para jugar. Y quizá tenés 5 varones y 5 mujeres. Acá hay que sacarse de la cabeza que todo es Capital o los lugares grandes. Yo fui a Jujuy e hicimos un campus con 600 nenas. 

La parte en la que hablamos del conflicto con las Gigantes la publicamos en una nota aparte el viernes pasado, que se puede consultar aquí.

- Te llevo a tu carrera como jugadora. ¿Hiciste un balance de esa etapa tuya?
. No, la verdad que no. Yo tuve limitaciones por no poder jugar por Argentina, por un problema que tuve con el entrenador de ese entonces. No tuve chances de intentar jugar una Olimpíada o un Mundial. 

-¿Cuál fue el problema con el entrenador?
. Él tuvo una diferencia conmigo porque yo a esa edad, 17 años, ya era lesbiana, y él pensaba que no era bueno que hubiese lesbianas en el equipo. Año 1989 más o menos. Ahí me alejé y me fui a Brasil, para poder jugar un Mundial de clubes ya que no jugaba el de selecciones, y pude ganar 4. Y después me fui a España, donde conseguí la Copa de la Reina con el Zaragoza. Allí había dirigido León Najnudel en 1984. Nosotros la conseguimos en 1990 en el estreno del estadio Príncipe Felipe. 

- Ese fue el día de tus 48 puntos en la final. 
. Sí, pero eso fue el milagro de un día. Pero no jugar en la selección me frustró, porque tampoco podía jugar con Brasil, entonces mis mejores amigas iban a Mundiales y Juegos Olímpicos y yo no podía. Entonces empecé a estudiar gestión deportiva. Quise prepararme para hacer algo. Hace 20 años era chino, nadie estudiaba eso. 

-¿Cómo fue tu chance de llegar a la WNBA?
. A mí el Miami Sol me vino a buscar en el 2000, pero iba a ser rookie, y yo no me bancaba eso. En la Liga de Brasil yo era muy destacada y venían jugadoras de la WNBA a jugar la Liga. La MVP de la primera WNBA, Cinthia Cooper, jugaba conmigo en Brasil. Paula y Hortencia tampoco quisieron ir a la WNBA, y no me comparo con ellas eh. La única que fue luego de 5 años fue Janeth, para Houston Comets. Nosotras teníamos como el compromiso de blindar nuestra Liga, que era buenísima. 

- Económicamente imagino que tampoco hacías diferencia si ibas a la WNBA.
. No, la WNBA en esa etapa no llegaba ni a los pies de lo que se pagaba en Brasil. Pero lo mío no fue económico, era el tema de no querer ser novata. O fui cobarde, o fui muy responsable con el contrato que tenía en Brasil. Llegué a jugar amistosos con el equipo en Miami, pero no acepté. 

-¿En ese tiempo, sin falsa modestia, a qué nivel mundial estabas?
. Yo creo que ahí ya estaba en el Top 10. 

-¿Llegasta a ser Top 5?
. No, nunca.

-¿Quiénes estaban en ese Top 10?
. Estaban Paula, Hortencia, Teresa Edwards, Sheryl Miller... En esa época, había muy pocas pivotes en el mundo. Yo tenía 1.88 y no podría jugar de cinco, pero en ahí sí. A mí se me hacía muy fácil en mi club porque jugaba con Paula y Hortencia. Todo el mundo las defendía a ellas en el perímetro y yo uno contra uno en la pintura lo hacía bien. Estuvimos dos años sin perder un partido y ganamos dos mundiales de clubes consecutivos. 

- Ese equipo de Ponte Preta debía poder competir en la WNBA por lo que me decís. 
. Si buscás en los archivos, nosotros con ese equipo le ganamos en Brasil a una selección de la WNBA. Para mí, a nivel de clubes, fue el mejor equipo del mundo de la historia. 

-¿Diana Taurasi es el ejemplo máximo para la mujer que juega básquet?
. Yo creo que es un ejemplo. Igual yo la cargo porque le digo que es fácil ganar tantos títulos con Estados Unidos. Pero lo que hace fuera de la cancha y su carisma, creo que la transforma junto con Teresa Edwards en las más importantes. Diana es una ídola, no se mete en líos. A mí, aparte, me gusta mucho Liz Cambage, pero es lo opuesto. Putea, se hace expulsar. 

- La última: ¿podrías haber cambiado un poco el básquet argentino si jugabas con la selección?
. Yo creo que aquí hubo una camada de Vega, Caro Sánchez, Laura Falabella, Andrea Galé...creo que con ese equipo hubiésemos llegado lejos. Podría haber colaborado un poco. O no. Yo creo que los equipos tienen química. Hoy Meli (Gretter) es una referencia nacional y sudamericana. Apuesto mucho por Flor Chagas. Burani me encanta, se dedica, se esfuerza. La generación U20 es muy buena y cuando se mezcle con la mayor no tengo dudas de que van a dar mucho. 

Fabián García / [email protected]
En Twitter: @basquetplus

 

 

 

 

 

 

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