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La gente esperaba en Madrid para ver finalmente a su selección en el camino final hacia la final y, por qué no. el título de campeón. Y, bien españoles ellos, no aceptaban otra cosa que no fuera: ganar, golear y gustar. 

Y a España le costó, porque Senegal le resultó un rival incómodo a partir de ser uno de los pocos que podía plantársele físicamente con chances de igualar a los Gasol. Igualmente, Pau les hizo un desastre en el arranque, aprovechando la velocidad que imponía Ricky Rubio de contra, pero más allá del 8-2 que podía hacer pensar en una paliza, los senegaleses no se desesperaron.

Dalmeida empezó a entrar en ritmo en la conducción, Badji y Faye aprovecharon sus ventajas físicas y, con una zona, se resguardaron mejor del juego exterior-interior de España, que bajó su nivel de corridas y de efectividad.

Senegal hizo una gran primera mitad, más allá de la inesperada baja actuación de Dieng (0, con 0/6 de cancha), y si bien se fue al descanso largo 41-28 abajo, no pasó papelones, usufructuó su atleticismo y no quedó más cerca por una mezcla de ingenuidad para defender y cometer faltas y una bajísima efectividad de cancha (32%).

España se dio cuenta de que si no apretaba el acelerador, podía tener una noche menos tranquila de lo esperada, y salió al tercer cuarto a quebrarlo. Vuelta a las fuentes, mejor defensa, un buen pasaje de Llull y, de repente, 19 de ventaja (47-28). 

Senegal recién a mitad del cuarto empezó a recibir algo de ayuda de parte de Dieng, desaparecido hasta entonces, pero tenía que remarla, y para eso no podía cometer muchos errores. Pues bien, cometió una enorme cantidad, muchos infantiles (varias caminatas de Dieng, tiros cómodos fallados) y encima no aprovechó la enorme ventaja de altura que tenía en las posiciones del 2 y del 3, ante Calderón y Navarro. Se terminó encegueciendo jugando con Dieng, y el pivote tuvo una noche horrenda.

Al último cuarto, España entró tranquila, con 19 de luz, y así transcurrió sin exigencias los últimos 10 minutos, en los que reguló, hizo descansar a Pau Gasol y rotó.

Terminó ganando 89-56 y llevándose lo primero que buscaba, que era la clasificación a cuartos de final, pero dejando una imagen menos sólida en la primera mitad, aunque abrumadoramente superior en la segunda. Pau Gasol fue el mejor con 17 puntos. 

Fabián García (Enviado especial a Madrid, España)
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