TNA 2016/17

El crecimiento de Nico Lauría: "Hoy soy otro tipo de jugador y estoy feliz"

21:13 28/05/2017 | El marplatense de Comunicaciones, uno de los más dominantes del TNA, habló de su evolución y la condición de líder que supo adquirir este año.

Nico Lauría ha logrado un crecimiento interesante a lo largo de este año (foto: Tu Mercedes)
Comunicaciones de Mercedes se clasificó a la final del TNA y espera por conocer a su próximo rival, que saldrá del cruce entre Estudiantes de Olavarría y Atenas de Patagones. El equipo correntino está redondeando una temporada fantástica y, si bien todavía le falta dar el último y más importante paso, la realidad es que lo hecho por el elenco de Fernando Rivero en el Norte ha sido excelente.
 
Atento a lo que sucede en el Sur sabiendo que hay una serie que aún no se ha definido, Básquet Plus dialogó brevemente con Nicolás Lauría para conocer un poco la actualidad de Comunicaciones. El gran líder del conjunto de Mercedes se refirió a las claves que han llevado a Comu a la lucha directa por el ascenso a la Liga, mientras que también contó cómo ha cambiado su juego para esta temporada y la función con mayores responsabilidades que ha logrado adquirir.
 
- El Norte estuvo repleto de equipos que a priori se prepararon para llegar a ser candidatazos, sin embargo siempre termina llegando y en este caso fueron ustedes, tal vez el que por calidad y experiencia daba a cumplir con ese pronóstico. ¿Por qué Comunicaciones y no otros equipos que también supieron brillar como Hindú o Unión?
. Creo que lo que hizo la diferencia fue el grupo y la cabeza de cada uno. Armamos un grupo excelente durante todo el año, donde cada uno supo encontrar su rol, supo prescindir de protagonismo si es que había que hacerlo, y tampoco hubo peleas ni nada de eso. Creo que eso fue lo que nos llevó y sacó adelante, porque en la situación límite que tuvimos contra Unión de Santa Fe se notó esa integridad como grupo. Se notó que todos queremos que el equipo gane, que todos queremos que el equipo llegue a buen puerto, y nunca hubo individualismo. 
 
- Claramente hubo una maduración.
. Vos sabés que en los playoffs los equipos se ponen más fuertes y maduros, a medida que va pasando la postemporada cada equipo se va poniendo mejor, y creo que esa victoria contra Unión en quinto partido, ganándolo a 6 segundos, nos motivó muchísimo y nos permitió dar un salto hacia adelante. Eso fue la diferencia que tuvimos con Hindú, Hindú fue un equipazo durante toda la temporada, que jugó siempre a lo mismo, y nosotros salimos en ese playoff de final de conferencia a morir, a cortarle todas las principales vías de gol de ellos y creo que lo hicimos a la perfección. Hoy estamos en la final del TNA por el ascenso, que era lo que vinimos a buscar desde un primer momento como decís. El equipo se armó para esto, no siempre se logra y en el TNA no hay una fórmula que diga "hacé esto y vas a llegar a la final", pero nosotros pudimos con trabajo, consistencia, buen grupo y buena gente, pudimos sobreponernos a todo, seguimos creciendo y lo pudimos lograr. Obviamente que esta mesa tiene muchas patas, no solo los jugadores sino también los dirigentes, el cuerpo técnico y la gente que nos apoyó. Creo que estuvo todo dado para llegar y por suerte llegamos. Te repito que no siempre se da, nosotros tuvimos la oportunidad de lograrlo y ahora nos queda otro pasito más.
 
- Hoy me hablabas de esa unión de grupo, y dentro de un equipo como ustedes que tan fuerte se armó desde aspiraciones y nombres no es algo que deba pasarse desapercibido. Contame cómo se dio esa comunión, ¿fue algo que se tuvo que trabajar o se dio de forma muy simple?
. No, fue algo natural, no hubo que forzar nada ni mucho menos, el grupo se fue formando y fuimos haciendo las cosas bien naturalmente. Se dio así, no es que hubo que poner retos, pautas o lo que fuese, nunca hubo problemas al respecto y si alguna vez hubo alguna queja o eso siempre se manejó entre nosotros y siempre pensando en el equipo. Un día le tocaba a uno, otro día le tocaba a otro, y así fuimos armando este equipazo que tenemos hoy, duro de vencer.
 
- Con los varios equipos que has integrado me imagino que tenés una especie de chip que se te activa para creer en la suerte de la temporada, ¿te pasó eso de sentir que en Mercedes podía darse algo como lo que se está logrando?
. Cuando uno llega a un equipo nuevo obviamente que la ilusión se renueva, quiere y trata de que el equipo funcione como tal, pero depende mucho también de la personalidad de cada uno y de lo que quiere. Y creo que nosotros estuvimos juntos desde dos meses antes de arrancar el torneo, y eso también te fortalece bastante porque estábamos en una ciudad chica, tranquila, nueva para todos, donde realmente no tenés muchas cosas para hacer y donde estás dos meses entrenando, viéndonos las caras todo el día, con triple o doble turno, más el físico... tener dos meses eso antes del torneo se convierte en una base súper importante. Obviamente que por nombre y demás debíamos ser los candidatos y demostrarlo dentro de la cancha. Poco a poco fuimos encontrando el equipo, los roles de cada uno, y fuimos logrando esto que te decía. A mi criterio creo que el momento bisagra, ese donde me dí cuenta que estábamos para cosas grandes, fue cuando se decidió el corte de Valentín Burgos y sin tener reemplazante. Teníamos que ir a una gira por Córdoba de tres partidos contra San Isidro, Barrio Parque y Tiro de Morteros, con esa ficha menos y encima en el medio del partido contra San Isidro nace la hija de Ariel Pau, por ende lo perdimos a él también en ese momento. Entonces tuvimos que afrontar casi toda la gira con dos fichas menos, perdimos por uno contra San Isidro por un triple (NdR: 72-71) y a Barrio Parque y Morteros les ganamos tranquilos (76-61 y 82-69 respectivamente). Creo que ahí fue el punto donde me di cuenta que el equipo estaba para cosas grandes porque con dos fichas menos ganamos en dos canchas difíciles y perdimos en el cierre con un triple de Sciutto en otra cancha muy difícil, creo que ese fue el momento en el que me dí cuenta para lo que estábamos. Después pasamos momentos buenos como una racha antes de las fiestas de 10 u 11 partidos ganados seguidos, y después pasamos por momentos de irregularidad que fue cuando volvimos de las fiestas y estábamos medios perdidos por momentos, porque ganábamos de local y perdíamos, pero después íbamos de visitante y nos recuperábamos. Creo que eso también daba un indicio, el ir de gira y ganar partidos cómodos también te hace presentir que estás para cosas importantes.
 
- El año pasado fuiste el mejor del TNA por lejos y este año subiste la vara claramente, cuando parecía que ya no había tanto por saltar vos lo lograste y sos el jugador más dominante del TNA de estos últimos años. ¿En qué momento te agarra todo esto que estás viviendo?
. Gracias por lo de dominante (risas). Que sé yo... mirá, creo que mi temporada pasada fue excelente, subí mi nivel en muchos aspectos y sabía que iba a ser difícil volver a repetir un año similar, pero yo me lo propuse. Me propuse dar un paso más, y si bien no gané el MVP de la fase regular creo que mi crecimiento pasó por otro lado. Pasó por ser realmente un líder, por llevar al equipo al objetivo, el objetivo de llevarlo a ganar el campeonato o pelearlo por lo menos. Por eso hoy te hablaba de prescindir protagonismo y demás. Obviamente que yo en Barrio Parque tiraba muchos más tiros, tenía la pelota más en la mano, y acá en Comunicaciones lo que me pidió el Tulo es que sea un líder. Y ser líder muchas veces no pasa por meter puntos, sino que pasa por muchas otras cosas como darte cuenta para dónde va el partido, para quién está el partido, para cuándo se tienen que tomar tiros y cuándo no, para cuándo pasar la pelota y cuándo no. Creo que ahí estuvo mi crecimiento y me siento totalmente contento y tranquilo al respecto. Si bien el MVP es buenísimo cuando te lo dan, yo hoy me considero otro tipo de jugador, no solamente un anotador sino también un generador, y eso me pone feliz, contentísimo. Ahora me doy cuenta por dónde pasa el partido, veo si estamos haciendo bien o mal las cosas para ganar y que eso no significa que yo tenga la pelota en las manos. Ahí creo que estuvo mi maduración de este año, en darme cuenta de que entre comillas controlo el juego, de sentir que realmente jugando de esta forma vamos para el lado que necesitamos para ganar. Me han pasado partidos donde no lo sentí y perdimos, pero en la mayoría lo he sentido, he tratado de llevar al equipo para ese lado y lo hemos logrado. Obviamente que detrás de mí tengo un respaldo enorme como es el Tulo y esta fue una de las primeras charlas cuando llegué acá a Comunicaciones, sobre todo porque en los primeros partidos yo no me hallaba mi juego y tuve que buscarlo. La realidad siempre es esa, uno siempre intenta mejorar y ser mejor, y hoy siento que no solo yo soy mejor sino que también lo son muy compañeros y por ende todo el equipo. Hasta los juveniles se dieron el lujo de poder entrar, jugar y estar respaldados, y hacer muy bien las cosas dándonos una mano increíble a nosotros también.
 
 
Lucas Leiva / [email protected]
En Twitter: @lucassleiva
En Twitter: @basquetplus
 

Compartir