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Si no lo detectas a tiempo, la depresión puede causarte varios problemas de autoestima y son varios los deportistas que tuvieron que atravesar por esa situación. Uno de ellos fue Alex Abrines, quien estuvo meses sin hablar luego de ser cortado por Oklahoma City por supuestos problemas personales.

El alero nació el primero de agosto de 1993 en Palma de Mallorca. Con tan solo 18 años debutó en la primera del Unicaja Málaga, y sus grandes actuaciones lo llevaron a ser traspasado al Barcelona en la temporada 2012/13.

En el club blaugrana estuvo cuatro años y obtuvo tres títulos: Liga ACB, Copa del Rey y Supercopa de España. En 2016 fue el mejor jugador joven de la Euroliga, además de conseguir la medalla de bronce en los Juegos Olímpicos de Río 2016 y el Eurobasket del año 2017. En su última temporada con Barcelona tuvo un gran desempeño y para el inicio de la 2016/17 tuvo su primer paso en la NBA con Oklahoma City Thunder.

Allí alternó buenas y malas. En su primera temporada fue elegido para disputar el encuentro de novatos del All Star Game. Compartió equipo con Russell Westbrook, Victor Oladipo, Steven Adams y Taj Gibson. Lograron la clasificación a los playoffs de la Conferencia Oeste y cayeron en cinco juegos ante Houston Rockets.

En sus tres temporadas en el Thunder, su equipo no logró pasar de la primera ronda de los playoffs. Ya en 2019, con tan solo 35 partidos disputados en toda la etapa regular, la franquicia de Oklahoma decidió cortarlo para que se convierta en agente libre.

Supuestamente, los directivos del Thunder decidieron rescindirle el contrato por problemas personales. Pero hubo un tema oculto, que llevó a la franquicia a tomar esa decisión. Pasó cinco meses sin hablar al respecto, continuó en la ciudad de Oklahoma, presenció algunos partidos de su anterior equipo y se lo vio activo en Twitch jugando videojuegos.

Hasta que un dia decidió romper el silencio, con un video más que emotivo. Allí expresó la unión que tuvo con el deporte desde que era niño, pero la actividad se había vuelto una obligación para él y hasta llegó a odiar al deporte: “Pasé mucho tiempo diciéndome a mí mismo que todo esto no podía ser verdad, no tenía sentido, que debía volver a ser el que era. Por eso pedí ayuda a los míos y recurrí a los mejores profesionales para recuperar la felicidad que sentía cada vez que estábamos juntos. Decidí decir basta, quería luchar por nuestra amistad y recuperar juntos la sonrisa. No ha sido fácil, muchas veces he pensado en tirar la toalla. Me decía a mí mismo que encontraría otrras maneras de inspirarme y sacar lo mejor de mí, pero nada ni nadie me ha calado tan hondo como tú. Así que me he armado de valor para acabar con esta pesadilla. Y lo he conseguido. He recuperado la sonrisa, las ganas de verte y de volver a pasar una y mil horas juntos. Querido balón, he vuelto”.

Meses después de la publicación de ese video, Alex Abrines volvió a vestir la camiseta del Barcelona. Consiguió dos veces la Copa del Rey y la edición 2021 de la Liga Endesa. También formó parte del equipo que consiguió el sexto lugar en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020.

Alex Abrines por suerte pudo superar sus problemas de depresión y volvió a encontrarse con su viejo y gran amigo, el baloncesto. En 2021 el Barcelona decidió confiar en él y renovó su vínculo con el club hasta 2026.

#Queridobalón🏀 pic.twitter.com/AWnh5JDxeq

— Alex Abrines (@alexabrines) July 3, 2019