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Desde que explotó el Covid pasaron muchas cosas, como el paisaje que se ve desde la ventana de un tren en un desconocido recorrido hacia un recóndito lugar. Casos positivos múltiples, suspensiones de partidos, una burbuja, un título, adaptación y sobrevivencia al máximo, minuto a minuto, juego a juego, sin parar, sin mirar atrás. 

Todo eso y vastos hechos más se produjeron en la NBA, que volvió a demostrar porqué es la mejor organización deportiva del planeta y no hizo más que aceptar los cambios y revitalizarse en el proceso. Ese camino llevó a la liga a organizar una temporada regular de 72 encuentros, diez choques menos que lo habitual.

Además, la vorágine también fue provocada por algunas franquicias, que traspasaron jugadores, ficharon otros y cortaron a unos cuantos más. Esos elementos de la bola de cristal se movieron y, como era de esperarse, los más inquietos lucharon por adaptarse. 

De ellos se analizarán cuatro en sus últimos diez partidos, con las similitudes de haber sido conjuntos clasificados a playoffs y que, a pesar de haber modificado considerablemente sus plantillas, en la previa se esperaba más de ellos y recién en la actualidad están empezando a engranar: Brooklyn, Miami Dallas y Denver.

Brooklyn Nets
Partiendo por Brooklyn, los dirigidos por Steve Nash no solo incorporaron al canadiense como entrenador, sino que también sumaron a James Harden y se desprendieron de Jarret Allen y Taurean Prince, entre otros. Desde el 16 de enero (la fecha en la que llegó el de los Rockets) hasta el diez de febrero el equipo de Nueva York tuvo un récord de 8-6 que dejó muchas dudas en los rincones de la liga.  

A pesar de eso, los Nets, sin Durant, ausente por lesión, comenzaron a carburar a partir del 13 de febrero, ganando nueve de los últimos diez partidos antes de la pausa obligada por el NBA All-Star Game y luciendo sólidos no solo en ofensiva, sino también atrás, donde encontraron en Claxton un gran protector del aro. 

Durante esa brecha Brooklyn lideró el certamen en puntos (122.9), tiros de tres (43.4%), rating ofensivo (122.9), true shooting (63.3%) y EFG (61.3%). Además, fue segundo en net rating (+9.5) y ratio de asistencias/pérdidas (2.43). Estos números demuestran cómo los dirigidos por Nash están tomando buenos lanzamientos, pasándose el balón y cuidándolo como pocos. ¿Mejorará la circulación y la defensa con la llegada de Blake Griffin? Eso está por verse.

Miami Heat
El ascenso de Miami tiene nombre y apellido: Jimmy Butler. ¿El récord de Miami sin él esta temporada por lesión? Un mísero 3-9. El impacto del escolta no solo se mide en números, también en actividad verbal, orden al resto y energía que se traduce en ambos costados de la cancha. 

Esto le está permitiendo al plantel de Florida vencer en siete de sus últimos diez partidos, siendo contundente en muchos de ellos, con triunfos ante serios contendientes a playoffs como Utah, los Lakers y los Raptors.

Butler rinde en defensa como pocos y allí el Heat creciendo, posicionándose sexto en rating defensivo en la liga en los últimos diez encuentros con 109.2. Además, la ofensiva comenzó a fluir y eso se puede ver en el porcentaje de asistencias, que lo ubica en el Top-3 de la NBA en ese total de partidos (tercero con 68.1%), a la vez que el ritmo se mantuvo como el más bajo de la competencia con 95.4. 

Dallas Mavericks
Solo Brooklyn ganó más partidos que Dallas en los últimos diez partidos. Ese es el despegue de un equipo que supo liquidar a los mismísimos Clippers de Paul George y Kawhi Leonard en los últimos playoffs. Ocho victorias y apenas dos derrotas para los dirigidos ofensivamente por Luka Doncic, quien también dio un salto en los últimos encuentros a partir de su eficiencia exterior.

11, 9 y 9. Esos fueron los partidos que se perdieron Maxi Kleber, Josh Richardson y Dorian Finney-Smith esta temporada. Los tres forman el estandarte defensivo de Dallas y los texanos los extrañaron muchísimo en los partidos en los que estuvieron ausentes. El 27 de enero volvieron el escolta y el alero y el 1 de febrero volvió el alemán. Los resultados están a la luz.  

La llegada de estos jugadores mejoró considerablemente la defensa, protegiendo el aro y los contragolpes, apartados en los que los Mavericks sufrieron anteriormente. En los últimos diez partidos Dallas fue el cuarto equipo que menos puntos permitió tras pérdidas (13.9) y el sexto que menos tantos concedió en la pintura (45.0). 

¿Y Doncic? Su puntería creció y su true shooting aumento de 57.2% en enero a 63.0% en los últimos diez juegos, a la vez que su EFG se elevó de 53.4% a 60.7%, reflejando el impacto en el tiro de tres, que posee una valoración mayor en esta última estadística. 

Denver Nuggets
A pesar de que la defensa continúa dejando dudas y el balance es del 60% en los últimos diez partidos (seis ganados y cuatro perdidos), los Nuggets dieron un salto en cuanto a circulación ofensiva, integrando a los nuevos nombres como JaMychal Green, Facundo Campazzo y compañía. Luego de las salidas de Plumlee, Grant y Craig los de Malone sufrieron para adaptarse adelante, pero parecen estar volviendo finalmente al ruedo.

En los últimos diez encuentros Denver fue el octavo equipo que más puntos anotó (116.8), el mejor en tiros de campo (51.3%), el quinto en triples (40.7%), el cuarto en libres (83.7%), rating ofensivo (119.1) y net rating (+7.3), y el tercero en EFG (59.1%) y true shooting (62.0%). Calidad de lanzamientos, paciencia para atacar a los rivales y talento para finalizar, esas cosas pusieron a los Nuggets en los puestos de playoffs en el Oeste.  

Otro motivo importante es Jamal Murray, quien pasó de promediar 19.1 puntos, 34.8% en triples, 52.7% en EFG y 55.6% en true shooting en enero a 29.5, 50.6%, 68.1% y 71.4%. El canadiense volvió a poner modo burbuja y su equipo lo disfruta, erigiéndose como el socio de Nikola Jokic que siempre supo ser.  

Ignacio Miranda/ [email protected]
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