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Scouting: ¿cómo jugó el seleccionado argentino en Tokio?

16:42 04/08/2021 | El elenco de Sergio Hernández mantuvo el mismo sistema que en el Mundial de China 2019. Luces y sombras de todo lo que pasó en el torneo.

Scola, Bolmaro y compañía (Foto: FIBA)

"El mérito pertenece al hombre que está realmente en la arena, cuyo rostro está estropeado por el polvo, el sudor y la sangre; que se esfuerza valientemente; quien se lo gana, quien se queda corto una y otra vez, porque no hay esfuerzo sin error y defecto".

Cuando Theodore Roosevelt pronunció ese discurso nadie sabía lo que pasaba por su mente, pero con seguridad no estaba pensando en el seleccionado argentino masculino de básquet que no pudo derrotar a Australia en los cuartos y quedó eliminado de los Juegos Olímpicos de Tokio.

La idea simplemente no pudo ser ejecutada de la misma forma que en China hace dos años y muchos son los factores analizables en ese lapso. Tal vez algunos de ellos se podrían detectar al teorizar cómo jugó el conjunto de Sergio Hernández en el torneo.

¿Qué cosas hizo bien Argentina? ¿En cuáles no logró el nivel esperado por el cuerpo técnico? ¿Números favorables? ¿Datos en contra? Las aristas son varias y las conclusiones también.

Partiendo por el costado ofensivo, y al igual que lo que ocurrió en el Mundial de 2019, el sistema de picks desde el eje continuó siendo la primera opción, con Facundo Campazzo, Nicolás Laprovittola y Luca Vildoza intercambiándose las posesiones como generadores, Marcos Delía haciendo las caídas (roll) y Luis Scola abriéndose (pop).

Sin embargo, la funcionalidad y naturalidad que tuvo la celeste y blanca en China no logró ser la misma en Tokio y eso se puede ver en el rating ofensivo (cantidad de puntos anotados cada 100 posesiones), que pasó de 109,83 en 2019 a 104,51 en 2021, según los datos de Tubscout.

Falta de eficiencia en el juego rápido, apuro a la hora de tomar decisiones y solucionar con lanzamientos veloces y pocas rotaciones complicaron al elenco nacional, a pesar de que hubo lapsos interesantes, como ante España en el primer tiempo, Japón durante la mayor parte del partido y frente a Australia en los dos cuartos iniciales.

Otro punto que no se pudo explotar de la mejor manera fue el poste bajo de Scola y Gabriel Deck, en parte por el control de las defensas en la pintura con las ayudas y por la prioridad que ambos le dieron al lanzamiento de tres, promediando 4,8 y 3,8 intentos desde esa zona respectivamente, con medias de 42,1% y 26,7%.

 

Fuente: FIBA

Además, bajaron su ratio de tiro de tres de 14,79 en el 2019 a 13 en Tokio, y solo Nicolás Brussino y Scola promediaron más del 35% en triples, con 38,5% para el exterior y la suma mencionada en el párrafo anterior para el capitán. Por ejemplo, Campazzo, Vildoza y Laprovittola estuvieron en 33,3%, 16,7% y 29,7% y eso les complicó a la hora de generar otros espacios para atacar el aro y anotar o alimentar al resto.

“Todo el equipo sintió que costaba encontrar respuestas, ataques claros… Hay que aprender de esta derrota y de lo que venimos haciendo. Lo que no vamos a parar de hacer es luchar, seguir intentándolo y compitiendo al máximo nivel”, explicó Nicolás con respecto al desempeño del torneo.

Defensivamente la filosofía también fue la misma. Presión en la primera línea, intentar hacer el cerco reboteador (box-out), puntear los tiros, intercalar estrategias en los picks y forzar pérdidas para intentar correr.

“Tenemos que buscar repetir rendimiento, compromiso con una idea de juego. Y no solo repetir, sino hacer un upgrade. Hay que intentar hacer mejor algunas cosas de nuestro juego. Enfocarnos en eso. Nos dio resultado el bloque defensivo alto, presionar la bola en todo el campo, bueno, hagámoslo más fuerte ahora. Nos dio resultado la carrera, fuimos el equipo que metió más puntos de ataque rápido en todo el Mundial. Bueno, no nos quedemos con eso. Los rivales van a prestar más atención a eso, entonces no debemos conformarnos con eso. También fuimos los primeros en puntos de ataque secundario”, le dijo hoy Sergio Hernández, entrenador del seleccionado, a Básquet Plus antes del certamen.

Lamentablemente, la idea no pudo plasmarse como en China y Argentina pasó de tener un rating defensivo (cantidad de puntos permitidos cada 100 posesiones) de 97,83 en 2019 a uno de 106,28 en Tokio, con una diferencia importante producto de cuestiones como las anteriores que no lograron ejecutarse de la manera pensada.

El torneo ya se esfumó, pero esos principios pueden seguir siendo el norte de un equipo que todavía tiene mucho para dar. Facundo Campazzo, Nicolás Laprovittola, Marcos Delía, Luca Vildoza… El básquet argentino está en sus manos y el talento de cada uno marcará una nueva era para la celeste y blanca, con un futuro que suena prometedor.

El infierno, como decía un gran músico, está encantador esta noche. El cielo, también. 

 

 

Ignacio Miranda/ [email protected]
En Twitter: @basquetplus
En Twitter: @nachomiranda14

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